𝐂𝐈𝐆𝐀𝐑𝐑𝐈𝐋𝐋𝐎𝐒, 𝐋𝐈𝐂𝐎𝐑, 𝐃𝐔𝐋𝐂𝐄 𝐂𝐎𝐌𝐎 𝐄𝐋 𝐀𝐙Ú𝐂𝐀𝐑

Otro Año

—¿Prefieres salir mañana o quedarte?— Jungkook murmuró, besando la parte superior de mi cabeza.

Todavía estaba luchando por acostumbrarme al afecto. Tomarnos de la mano y sentarnos uno cerca del otro. Ser arrastrado fuera de mi oficina a las dos de la mañana y tirado hacia abajo en la cama. Estar envuelto en cálidos brazos y no temblar por las cosquillas en mi cuello. Besos castos, y manos lentas y errantes. Jungkook todavía tenía su propia habitación, e incluso me había tomado la molestia de volver a aislar las paredes y deshacerme de las corrientes de aire, pero estaba empezando a dormir en mi cama con más frecuencia.

Todavía era extraño despertar junto a otra persona. Todavía era extraño tener comestibles en la cocina. Todavía era extraño tener una razón para salir de mi oficina además de comer o usar el baño… o trabajar. Fue extraño encontrarme escabulléndome después de recibir una llamada telefónica. Era extraño celebrar las fiestas.

Extraño, pero extrañamente no incómodo.

—¿Mañana? ¿Por qué?

—¿A qué te refieres con por qué? Mañana es tu cumpleaños.— Él resopló. —¿Qué haces normalmente?.

—No sé… nada. Bueno, después de que Seokjin descubrió cuándo fue, me horneó un pastel y vino siendo desagradable, pero solo se enteró justo antes de mi cumpleaños el año pasado.

—¿En verdad?

—Sí... al mismo tiempo que descubrió mi nombre— Suspiré.

—¿Pero antes de eso?

—No podíamos permitirnos los cumpleaños… mi papá no podía permitirse el tiempo libre… y yo no tenía ganas de celebrarlo. ¿Cuál es el punto de todos modos? ¿Por qué celebrar algo que no tiene consecuencias?.

—Estás celebrando el hecho de que lograste pasar otro año.

—Para eso es el Año Nuevo.

—No, el Año Nuevo es para celebrar el año que viene. Solo… Olvídalo, nos quedaremos, pero voy a invitar a Seokjin.

—Incluso si no lo hicieras, él vendría de todos modos, apuesto.

Me alegraba de que no estuviera planeando hacer algo como los últimos dos cumpleaños a los que me vi obligada a asistir. Taehyung fue menos formal, menos desastre. Tuvo lugar en el bar, porque aparentemente no es nada extraño ir de fiesta donde trabajas, y había más de unas pocas personas que nunca había conocido allí, pero sí conocía a suficientes personas para que no fuera demasiado incómodo. De alguna manera, los amigos de Jungkook me habían recibido por completo como uno de los suyos, evidente por Jimin arrastrándome para hacer karaoke con él. Nuestros dos grupos de amigos se fusionaron en un grupo un poco más grande, con Hoseok, obviamente, Seokjin y Namjoon también presentes.

La Navidad terminó siendo prácticamente igual, los siete nos reunimos en casa de Hoseok porque sus padres estaban fuera del país para lo que él llamó 'una luna de miel improvisada'. No fue desagradable, a pesar de que todavía estaba tratando de acostumbrarme a lo que probablemente era algo bastante normal para los amigos.

Ni siquiera estaba completamente acostumbrado al concepto de tener amigos.

El Año Nuevo vino y se fue con mucho licor, muchos juegos y muchos vítores a medianoche cuando Jungkook se inclinó para besarme. Esto último es en gran parte de Jimin y Taehyung. Es decir, hasta que Hoseok decidió callar a Taehyung con un método similar. Puse los ojos en blanco y empujé a Jungkook, pero yo estaba sonriendo, y era lindo... y sorprendentemente era un fanático del cliché.

En febrero, me di cuenta de cuántas vacaciones se juntan en los meses de invierno. Afortunadamente, Jungkook trabajó en la noche de San Valentín, pero eso no impidió que me arrastrara a un restaurante durante el día. Estaba lleno y quería irme a casa, pero maldición él se veía bien y maldición la comida era buena. (Maldita sea me preguntaba cuándo diablos consiguió ese traje, porque sé que no era de Seokjin).