/Encantador de Omega/2

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- Izuku, te conseguí el cuaderno de notas que querías. - dijo el alfa entrando a la habitación con una bolsa de supermercado.

El omega se estaba tomando un baño, luego de haber recibido la noticia le dieron el día libre y lo enviaron a casa. En ningún momento le dijo a Katsuki lo que había pasado, a petición de Iida, ya que era una situación complicada. Aún se sentía en un verdadero dilema, por suerte su aroma aún no comenzaba los cambios de gestación por lo que tenía tiempo para pensarlo. Era su cuerpo si, pero era el hijo de ambos y debía informarle la situación a su pareja si o si.

- Deku ¿Quieres ver una película? - dijo el alfa entrando al baño.

- Si ¿Compraste helado? - preguntó curioso. Katsuki tomaba la gran toalla y luego de Izuku saliera de la tina lo envolvió y seco. Le encantaba consentir al pequeño omega.

- Si, chocolate granizado y Banana Split para ti. Y menta granizado para mi. - dijo. Tomo una pequeña toalla y seco el alborotado cabello de Izuku. Luego el omega camino como si nada desnudó en la habitación donde de vistió con una camisa del alfa y sus pantalones cortos.

Al llegar a la sala encendió la televisión y colocó una película de acción, ni él ni Katsuki eran muy amantes de las películas románticas, ellos vivían su propia película romántica. No era necesario ver la miserable vida de los demás. O eso decía Katsuki, por que Izuku no las veía porque se encariñava con cualquier personaje y no le gustaban que no todos tuvieran un final romántico.

- Sabes, hoy celebramos el nacimiento del cachorro de uno de los trabajadores. - dijo Katsuki tendiéndole el tazón de helado. -El alfa tubo mellizos, que locura. -

- Si. - dijo pedido en la frase.

- Estas actuando extraño esta noche, cariño. - acarició su mejilla. - ¿Hay algo que te preocupa? -

Izuku no le respondió, solo negó con su cabeza y sonrió para calmar al alfa aunque sabía que eso no funcionaría, así que le dio play a la película en un intento de cambiar de tema. En ningún momento presto atención a lo que ocurría en la película, realmente se sentía muy angustiado y dudoso.

¿Que debería hacer?

Un bebé, un cachorro, una bendición o una perdición.

Siempre supo que este día llegaría, pero él esperaba prepararse mentalmente para elegir junto a su alfa el momento de tener un bebé. Sabia las probabilidades de que un bebe no deseado eran altas en relaciones jóvenes, un desliz, un olvido de protección o un fallo en un condón. Muchas forma de llegar al mundo, muy pocas son productos de un deseo.

...

Al otro día despertó más animado que antes, Katsuki le había dado su espació y él había pensado todo con sumo detallé. Un bebé no era el fin del mundo, de echó era el inició del suyo. No sabía que seria de él y sus cambios en su cuerpo, pero con tal de saber que un pequeño Katsuki crecía en su vientre era muy reconfortante. Quería que esos tan profundos y feroces ojos los tuviera su cachorro, un calor tan cálido y brillante para él sería un deseo muy grande para Izuku.

- Me voy Kacchan. - sonrió y beso la mejilla de su alfa.

- Te ves mas animado. - abrazo al omega dándole un casto beso en los labios. - Esa es la luz que me gusta ver en ti. -

- Te amo mucho Kacchan. -dijo uniendo su frente con la contraria. - Bueno, nos vemos mas tarde. - salio de la casa con energías a su trabajo.

Tendría un bebé, tendría sus consecuencia pero todo valdría la pena si es junto a Katsuki. Su omega le había echó sentir a través de un sueño la melodía mas hermosa que había escuchado, los latidos de su cachorro, fue el momento mas único e inigualable de su vida.

- Tu nacerás bebé, sin importar que cueste. - acarició su plano vientre.

...

"¿Hasta cuando crees que guardé el secreto para si solo?"

- Mi omega, tendrá un cachorro.- dijo en un susurro mientras su cuerpo daba leves espasmos. - Perderé a mi omega. - dijo entre llantos.

Un confusión de emociones se producía en su interior, debería sentirse orgulloso pero el dolor de no saber si Izuku podría con la carga de un cachorro puro era mucho mas grande.

Sin darse cuenta había corrido fuera de su hogar para luego conducir a gran velocidad a la casa de su madre. Sus aguados ojos no le permitían ver bien, así que cuándo llego arrojó el automóvil en cualquiera parte del jardín y corrió puertas adentro. Podía olerla en la biblioteca, azotó las puertas de par en par asustado a la mujer que estaba adentro.

- ¡Katsuki que crees- ¿Oye sucede algo? - él solo caminó de forma muy calmada, tambaleándose por dolor que comenzaba a tener mas lugar en su corazón. No sintiéndose capas de sostenerse en su piernas de dejo caer de rodillas frente a su madre, apoyando su cabeza en el regazo de ella para iniciar su lamentable llanto.

- ¡Mamá! - grito y apretó su cabeza en sus piernas. - Izuku... Izuku esta embarazado. -

La mujer fue sorprendida con tal revelación, pero luego pudo reconocer esos sentimientos, esa desesperación de no saber que ocurría con su pareja. - Hijo tranquilo, él es fuerte. - acarició la cabellera de su hijo, dejando que este desahogue en su regazo.

Un llanto que perduró por esa mañana.

Ni Izuku, ni el omega sabían que en el momento de sentir los latidos de su cachorro de alguna manera tanto como Katsuki como el alfa también lo oyeron.