Oh well, whatever, nevermind [+18] [Español] (En Pausa)

25. KURT (I)

Where were you

When I was burned and broken?

While the days slipped by

From my window watching

KURT

Mierda y recontra mega ultra mierda.

—Siempre debe joderme de alguna manera, ¡carajo!

Aprieto los dientes por la rabia.

Mi enojo aumenta cuando veo las luces del lugar al igual que la de varias patrulleras, unos llegando al lugar, otros saliendo y otros estacionados mientras que los oficiales se comunican por esa pequeña radio con la que cuentan.

Bufo y aparco tan bien como mi frustración me permite.

Muevo mi cuello de un lado a otro, este cuenta con un ligero dolor causado por el estrés que me está generando esta situación.

Recuerdo la llamada.

«—Ay, hasta que contestas —susurró como primeras palabras.

—¿Qué quieres? —demandé saber con frialdad.

Observé sobre mi hombro a Coraline. Sus ojos estaban clavados en el agua que corría libre debajo del muelle, pero no me detuve en eso, sino en lo vacía que se veía esa mirada.

—Necesito que vengas por mí

Fruncí el ceño y alejé el teléfono de mi rostro para observarlo con incredulidad. Resoplé y guié de nuevo el artefacto hasta mi oreja.

—¿De dónde carajos me llamas?

Hubo un largo silencio, luego voces que desconocí y tuve el presentimiento de que lo siguiente que diría no sería de mi agrado.

—De la comisaría.

Abrí mucho los ojos sin dar crédito de lo que decía, pero luego recordé con quién estaba hablando y se me pasó.

Suspirando, me ordené ser lo más calmado y cuidadoso posible al volver a hablar.

—Que te jodan.

Hasta podía hacerme una idea de cuál fue su expresión en ese instante, pero no le di más vueltas y corté la llamada».

En ese instante creí que hacía lo correcto, y tal vez lo es después de toda la mierda que tuve encima gracias a ella, pero soy consciente de que parte de la culpa fue mía y que ella está sola, ya no tiene a nadie. No siento lástima, simplemente soy un humano que no puede dejar pasar esto.

O tal vez sea lo sensible que quedé luego de la charla con Coraline pero, al estar besándola —y casi ir por más—, no podía estar concentrado únicamente en ella, mi mente me gritaba que debía resolver lo que sea en lo que se ha metido Valeria. Sentí incorrecto estar disfrutando de la compañía de Cora y a la vez dejar a otra persona a su suerte.