Mi Estúpido Jefe

Capítulo 18

Han pasado 20 minutos después de que se fué de tal lugar, la verdad no sabía cómo sentirme.

Damián -pensé-, en serio te desconozco, ¿Cómo pudiste hablarle así a un niño?

Luego salí directo a mi lugar de trabajo.
En todo el camino solo pensé en la actitud que tomé en ese momento.

- Debería disculparme en el bar....

Llegué al puesto de mi secretario (está a unos pasos de la mía, así que no es raro que llegué ahí), no me extrañó que no estuviera, capaz estaba haciendo algún mandado, aunque lo más probable es que esté en el baño con un montón de gotas de agua cayendo de su cara.

Debe verse muy sexy así.... ESPERA ¿QUÉ?

Moví mi cabeza de lado a lado intentando olvidar lo que acababa de pensar.

Habían pasado 80 minutos después de lo que pasó y aún sigo nervioso.

- Espero no haberlo lastimado mucho, ví de reojo que tenía sus ojos un poco llorosos, espero que no esté llorando. Espera. ¿Quién lloraría por tanto tiempo?¿No le dará dolor de cabeza llorar de esa manera?

Me fuí de mi oficina, miré sigilosamente al puesto de mi secretario y estaba como si no hubiera pasado nada.

¿Soy el único preocupado aquí? ¡¿He estado todo el día preocupado por él y este está como si nada?!

-Maldito...

Volví a mi puesto de trabajo, en donde por alguna razón estaba el vicepresidente esperándome sentado encima de mi mesa.

-¿Y tú qué haces aquí?

-Yo te tengo buenas noticias, ya hablé con tu secretario y CIVILIZADAMENTE quedamos en que él no va a contar nada de lo que vió, no como hizo el señor aquí presente (que cabe recalcar que ese NO soy yo) quien lo amenazó con violarlo si no iba a un maldito café.

-Perdón...

-¿Perdón? A mí no me debes una disculpa, se la debes a ese pobre chico, capaz lo dejaste super traumatizado.

-Me voy a disculpar con él en el bar, tampoco iba a ser un maldito.... Bueno, más de lo que ya fuí, pero ¡¿Ya lo viste?! Actúa como si no hubiera pasado nada y estuve todo el día preocupado por él.

-Te lo mereces

-¿Qué? ¿Eres mi amigo? ¿De qué lado estás?

-Asi como escuchaste y obvio soy tu amigo, pero esta vez si estoy con el chico, es que en serio lo trataste muy mal.

-¿Tan mal como para que ya no estés de mi lado?

-Si

- O rayos.... Entonces si esta como grave la cosa. Está decidido entonces, hoy si o si me disculpó con él.

-Si si si más te vale hacerlo

-Mira para que me creas voy a ir ya al bar y lo voy a esperar ahí. Adiooss

-Hey no, espera, son las 5:45 PM ¿Qué vas a hacer en un bar a esa hora? Más bien ve y cámbiate.

-Bueno si, adiooos~

-Adiós

Me fuí a mi casa a cambiarme, aunque la verdad no sé qué ponerme, la mayoría de mi guardarropa había ropa formal, el resto era mi ropa para dormir....

- Bueno, lo mejor que podría colocarme sería un pantalón elegante con la camisa de botones.... Mejor voy a comprar ropa....

Fuí a la tienda de ropa que más estuviera cerca de mi casa. Miré todo el almacén y me di cuenta que toda la maldita ropa "de fiesta" ya la tengo, entonces me devolví para mi casa, me coloqué uno de los pantalones más ajustados que tenía, luego me miré al espejo:

- Uffff, en serio, si ese hombre no se enamora de este culote, no sé qué putas le pasa. Mierda estoy buenísimo.

Luego me coloqué una camisa blanca de botones, me dejé los últimos dos botones sin abotonar.

Me fuí al bar, eran las 6:15 PM, no había llegado aún.

¿Si vendrá?

Fuí a la barra y para esperarlo tomé un poco de whisky. Pero eran las 7:00 PM y aún no estaba en el bar. Luego de un tiempo escuché que había un escándalo en la puerta, así que me giré y lo ví.

No puede ser..... ¡¡¡Si vino!!!

Me di cuenta que se iba a ir del lugar, así que fuí corriendo hacia él y le dije con un tono de superioridad:

- Oye, tu a dónde crees que vas, ¿Acaso piensas que solo porque el de seguridad no te dejo entrar yo te iba a dejar escapar así como así?

Ví que giró su cabeza. ¡Pero después me ignoró! Lo único que se me ocurrió fue seguirlo.

- ¡Oye te estoy hablando! Te dije que no vas a escapar de mi.

Empezó a caminar más rápido, así que yo también lo hice, pero después de media cuadra me detuve, pero sin perderlo de vista.

¿En serio está tan incómodo conmigo?¿Estará bien seguirlo? Por alguna razón...no puedo dejarlo ir.

Así que corrí hacia al semáforo en el que estaba, necesitaba abrazarlo, así que inconscientemente lo abracé por detrás y le susurré al oido molestando:

-Jajajajaj, ¿pensabas que te iba a dejar ir?

Señalé el café que estaba en frente de nosotros y susurrándole con un tono burlón le dije:

- Vamos a ese café solo a charlar, pero solo por esta vez, deberías agradecerle a tu amo por ser tan bueno en esta ocasión, Quizás mañana en mi oficina deberías mostrarme tu agradecimiento, ¿No crees?

Vi de reojo su cara y sus mejillas estaba toda rojitas, parecía un lindo bebé.

- ¿D-de que está hablando usted? Suelteme, no tengo nada que agradecerle.

- Solo vayamos a ese maldito café, es en son de paz, no te voy a hacer nada.... o al menos no ahorita.

- ¿Qué dijiste estúpido?

- Nada nada, mira ya está en verde para nosotros, vamos.