POV BILLIE.
-De nuevo mirando la foto - afirmó Camila.
-Mirar la foto te pone mas triste - dijo Lauren quien entró junto a Camila a la sala del departamneto que rente en México.
-Me hace extrañarla menos si la miro en una foto.
Dije mirando fijamente la foto de la vez que fuimos de excursión, sonrrei al ver que tenía abrazada a Ali en aquella foto que tomo Olivia.
-Lo sabemos pero te hace mal - Lauren me abrazo por la espalda.
- En realidad me ayuda a no sentirme sola en este lugar tan grande.
-Pero vivo alado, sabes que puedes venir al departamento cuando quieras - Lauren me abrazó fuertemente.
-Lo sé pero quiero estar aquí, la casa tiene su aroma.
-Tranquila ella regresará mañana.
-Lo se y llegará con Mau - dije con una sonrrisa.
-Todos juntos otra vez - Lauren dijo con evidente alegría.
Yo también lo estaba, estariamos los tres juntos como cuando estudiabamos, solo que ahora Camila también formaba parte de nuestro círculo.
-Ya quiero que llegue para molestarla.
-Sabes que no se puede alterar mucho Lauren - Camila le dijo.
-Lo se pero es agradable bromear con ella, como cuando eramos todas una niñas idotas - Solte una pequeña risa.
-Suena un celular - Camila dijo.
-Es el de Billie - Lauren hablo con una sonrrisa.
-Ella no puede vivir sin ti - Camila se burló y gire los ojos.
-Nos vemos mañana te dejamos hablar con la enamorada mas boba que he conocido - Lauren se burlo y sonrrei.
-Nos vemos mañana chicas.
Ellas salieron.
Sonó de nuevo mi celular y sonrrei en automático. Conteste la llamada y aparecio la hermosa cara de mi chica.
-Hola nena ya te extraño - dijo con una gran sonrrisa.
-Yo también te extraño mucho, el departamento se siente muy solo. - hize un puchero.
-Ya mañana me tienes contigo, dejame decirte que no me voy a separar de ti.
-No quiero que lo hagas.
Ella coloco su celular en una base y pude mirarla mejor, coloco ambas manos en su quijada y miro a la pantalla sonriendo.
Mis ojos se iluminaron al ver el anillo que tenía en su mano.
-¿Por qué sonrries haci?.
-Me gusta mucho ver el anillo en tu mano.
-Me gusta tenerlo, me hace sentir cerca de ti - sonrrei y ella hizo lo mismo.
-¿Cómo te la estas pasando en Canadá?
-Muy bien, es hermoso este lugar, es muy frío y me gusta, tiene unas hermosas montañas en las que puedes rentar un trineo y pasear por la nieve.
-Me gusta verte feliz, y en ¿donde esta Mau?.
-Salió a comprar donas - sus ojitos brilaron - Las donas de aquí son muy buenas, tienen un excelente chocolate caliente y frío - la mire con la ceja levantada - Pero no se compara con el que tu me preparas.
- Me agrada saberlo,si no estaría celosa.
Solto una risista que calento mi corazón.
-Te amo - dijo sin más y sonrrei.
-Yo también te amo.
Seguimos hablando hasta que Mau llego.
Como cada noche me vestí con una de sus playeras, me hacian sentir que ella está cerca.
Al oler su aroma cerre los ojos y me dormí.
Sentí unos pequeños besos en mi cuello, me movi incómoda, abri los ojos y me gire.
Al girar me lleve una hermosa sorpresa, mi chica esta a lado mío sonriendome
Sonreí instantáneamente
- ¿Qué haces aquí? - pregunte con evidente confusión.
-¿Sopresa? - la mire. - Te mentí en la hora de llegada, quise darte la sorpresa cuando despertaras - solo la miraba - ¿Estas molesta? - pregunte y negué.
-Solo que es tan irreal tenerte aquí conmigo, un mes sin ti fue mucho tiempo - se acercó lentamente y dejo un beso suave en mis labios, suspire.
-Te extrañe mucho amor - ella me miro.
-También yo, no quiero pasar tanto tiempo sin ti.
La acerque a mi y la bese profundamente, poco a poco quedo encima de mi pero sin llegar a lastimarme.
-Te amo chica de ojos oceánicos.
-Te amo mi pequeño desastre.
Se acercó de nuevo y me beso, tan suave y tan lento que cada célula de mi ser quería explotar de amor.
Los besos que comenzaron siendo lentos se convirtieron en besos más apasionales y necesitados, mi respiración ya estaba muy acelerada.
Me separe un poco y mire el reloj que se encuentra en la mesita de noche.
-¿Qué sucede? - preguntó.
-Es muy temprano - ella miro el reloj 5:40 am, es lo que marcaba.
-Perdón por despertarte,ahora vamos a dormir - negué y la apreté más contra mi cuando intento levantarse.
-Debes dormir.
-No - hize un puchero - Se me ocurre otra idea - dije con una sonrrisa maliosa.
-Que, a que te refieres - habló con nerviosismo ya que comenze acariciar su cintura bajo la tela.
-Un mes desde que te fuiste - hable lantamente, me acerqué a su cuello, deje un beso en ese lugar. - Y no he sentido tu piel - mis manos comenzaron acariciar sus brazos - Es temprano y no me molestaría desvelarme - mis manos bajaron a su tracero - Pero si estas cansada podemos esperar - deje un beso en sus labios.
Ella se quedo quieta en en lugar, desvío su mirada al reloj,me sonrió.
-Para tener un buen sueño, necesito hacer algo de ejercicio, la doctora dice que a mi cuerpo le hace bien el ejercicio.
Sin esperar choque mis labios con los de ella bruscamente.
Sentirla y amarla al máximo poder es algo de lo que jamás me cansaria.
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La misma Luna
RandomMe tomo de las manos y me miró - No se que pase pero solo te prometere que sea donde estés, estés a mi lado o no te sentiré cerca al mirar la luna. -¿Por qué? - le pregunté. - Por qué se que ambas miraremos la misma Luna.