Guardianes de la felicidad

Capítulo 149

Capítulo 149:

Mar se dirigió a la cocina para ver por qué Thiago tardaba tanto en subir. Pero él no estaba en la cocina, ni en el comedor

Mar: Pela? Dónde estás?

No obtuvo ninguna respuesta. Comenzó a preocuparse aún más, puesto que era muy raro que Thiago no contestara. Lo buscó un rato, hasta que fue hacia el patio. Y allí se sorprendió con lo que encontró.

Thiago estaba de pie, mirando un punto fijo en el medio de la nada. Ni siquiera la miró cuando ella entró

Mar: Pela? Te pasa algo?

Thiago no le respondió. Mar se acercó un poco más a él, pero al notar que no reparaba en su presencia, apoyó sus manos sobre sus hombros. Thiago giró, sobresaltado

Mar: Te pasa algo? Thiago!

Thiago: Qué?

Mar: Qué hacés acá?

Thiago: Yo…

Mar: Te sentís bien? Estás pálido

Thiago: estaba en la cocina, y …

Mar: Y qué? Me estás asustando

Thiago: Escuché a Juan Cruz

Mar: Qué? Juan Cruz está acá?

Thiago: No… no creo que esté acá. Escuché su voz en mi cabeza

Mar: Cómo? De verdad?

Thiago: Sí. No me dijo nada directamente a mí, parecía que hablara con alguien. Se está metiendo en mi cabeza de nuevo…

Mar: No, no pienses eso

Thiago: Sí, Mar!Se está metiendo en mi cabeza otra vez! Ese enfermo me quiere manipular

Mar: No te va a hacer nada, te lo prometo

Thiago: Tengo miedo de que me haga hacer algo

Mar: No va a pasar nada. Vamos a dormir ahora, mañana temprano hablamos con Cielo

Thiago: No…

Mar: No que?

Thiago: No me quiero quedar acá. Es peligroso

Mar: No digas pavadas, Thiago

Thiago: No son pavadas. De verdad. Juan Cruz puede hacer cualquier cosa conmigo

Mar: Dale, Pela. Por favor, no hagas nada

Thiago: No me puedo quedar acá sabiendo que mañana me puedo despertar y terminar como Salvador

Mar: Por qué como Salvador?

Thiago: No te acordás lo que hizo? Juan Cruz se metió en su cabeza, e hizo que mate a su novia

Un escalofríos recorrió la espalda de Mar, aunque intentó hacer que no se note. No quería que Thiago pensara que ella tenía miedo

Mar: Eso no va a pasar

Thiago: No sabemos. Es capaz de hacer cualquier cosa

Mar: No hagas nada. No te voy a dejar. Thiago, yo confío en vos, sé que vamos a estar bien.

Thiago: Yo no confío en mí mismo

Mar: Tendrías que hacerlo. Juan Cruz no va a poder contra nosotros

Thiago: Mar, hay cuatro chicos durmiendo acá

Mar: Y por eso mismo, ellos necesitan que su papá esté acá para cuidarlos. No te vayas a ningún lado

Thiago: Me da miedo, que pueda lastimarlos

Mar: No les va a pasar nada. Ahora vamos a dormir, y mañana hablamos con Cielo para hacer algo. Y también tenemos que preparar tu bolso

Thiago: Sí, con eso…

Mar: Nada. Vos vas a ir con Simón al sur, y no se discute

Thiago: Desde cuando estás tan autoritaria?

Mar: Desde que tengo que estar pendiente de que mi familia no enloquezca

Thiago: No tengo ganas de viajar

Mar: Pero ya se lo prometiste a Simón. La van a pasar bien

Thiago:Eso espero

Mar: Vamos a dormir?

Al ver que Thiago dudaba, se acercó a él y lo besó en los labio, pasando sus manos por su cuello. El la tomó de la cintura, acercandola más. Bueno, todo lo que su panza la dejaba

Mar: Yo confío en vos

Thiago: Gracias

Mar: Vamos a dormir, por favor. Me muero del sueño

Thiago:Vamos

Volvieron a entrar a la casa abrazados, aunque Thiago no logró conciliar el sueño en toda la noche. Le preocupaba que Juan Cruz esté en su cabeza de nuevo