Black Velvet

Cap.VI- Dualidad

En una lujosa sala de forma oval Viktor Nikiforov sacó de un cajón perfectamente cerrado de su escritorio de fina madera un folder de color negro que al abrirlo dejó ver varias fotografías de hombres y de un par de mujeres acompañadas de una breve descripción, algunas no tienen ninguna marca y otras en cambio ostentan grandes letras de color rojo con la palabra "eliminado" son los obstáculos que el ruso a derribado en su camino al poder absoluto en la temible bratva que gobierna con mano de hierro, aunque admite que eso no habría sido posible sin la ayuda de un chico de cabello rubio y brillantes ojos verdes en quien tiene a su mano derecha y aprendiz, se trata de su medio hermano Yuratchka Plisetsky también llamado Yura. Este se encarga de que todo que lo que el peliplata manda se cumpla al pie de la letra sin más objeción ya que para él su hermano mayor es su ejemplo a seguir cuando se viese obligado a ocupar su lugar algún dia quizá no tan lejano pues en ese mundo la diferencia entre vivir o morir está estrechamente ligada.

-Adelante.- dijo el ruso cuando un suave toque que conocía perfectamente se escuchó en la puerta.

-¡Vaya! veo que estás actualizando la lista.- dijo Yura al ver un par de fotos que desconocía sobre el escritorio.

-A cada rato la actualizo-.- respondió con una sádica sonrisa.

-Entonces le alegrará saber que por hoy hará varios cambios. -añadió Otabek Altin que en ese momento entró y se sentó sobre un cómodo sillón.

-Beka tiene razón.- afirmó el rubio sentándose en una mullida butaca al mismo tiempo que ponía sus pies arriba del fino escritorio.

-¡Baja tus sucios zapatos de mí escritorio!.- le exigió el peliplata sin embargo el aludido ni siquiera se inmutó.

-La visita a Ucrania fue bastante provechosa, constatamos que es un magnífico mercado.- siguió diciendo Yura.

-Con una feroz competencia también.- añadió el kazajo.

-Eso no será ningún problema, nosotros somos mas fuertes y ese mercado pronto será nuestro y quien se oponga terminará bajo tierra - respondió Víktor.

-Hablando de eso, me pusé en contacto con Demian Kovalenko que es el jefe de la policía militar y le dije claramente nuestro plan de expandirnos a su país.-

-¿Y que respondió?.- preguntó el peliplata al mismo tiempo que se servía un vaso de vodka.

-Al principio se opuso, asi que digamos que tuve que usar algunos métodos de persuasión como por ejemplo poner una pistola en su cabeza y advertirle que nos cubrirá o y el y su familia verán a sus ancestros mas pronto de lo que creen.-

-Ese método nunca falla.- respondió el peliplata tomando el líquido de su vaso casi de un solo trago.

-Jamás. en fin, todo el norte ucraniano es nuestro. también aquí está la lista de los que no aceptaron colaborar aunque al final lo lamentaron- el rubio sacó un papel de su bolsillo y lo puso sobre el escritorio.

-Excelente trabajo, esperen un momento.- Víktor de su escritorio sacó un grueso fajo de relucientes billetes y puso una fuerte cantidad en manos de cada uno.

-¡Es demasiado!.- exclamó el kazajo.

-Y les aseguro que se han ganado cada uno de esos billetes, de hecho tomen una semana libre.-

-¡Magnífico! por ahora iré a tomar un baño relajante, estoy exhausto por el viaje en auto hasta aquí- contestó Otabek levantándose del sillón para enseguida salir de la sala.

Cuando ambos hermanos se quedaron solos fue Yura quién rompió el silencio.- ¿y cómo se ha portado el nuevo cocinero, no ha dado problemas?.-

-Sólo al principio, en un par de ocasiones mi desayuno se demoró hasta las nueve y en otra olvidó que los mariscos no me agradan y me sirvió camarones en salsa dulce. Por lo demás parece estar resignado a su nueva vida.-