Cap XXVI- Una noticia feliz.

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Viktor al entrar a la mansión bajó del vehículo con su preciada carga y subió a toda prisa las escaleras hasta llegar a su alcoba donde depositó al nipón sobre la cama.

--¿Está Chris en la mansión?.-- le preguntó a Mila que junto con Yura los habían seguido llenos de preocupación.

--Acaba de llegar hace unos minutos.-- contestó Mila.

--Llámalo.--le ordenó.

La pelirroja obedeció en el acto seguida de Yura dejando solo a Viktor con Yuuri que para ese momento ya mantenía los ojos abiertos atento a su entorno.-- Vit..vitya.- dijo con dificultad ya que aún arrastraba las palabras.

--Tranquilo, ya estamos en nuestra habitación, ¿la reconoces?.--

--Sí.-- respondió con voz baja.

--Ahora vendrá Chris y te dará algun medicamento para que el efecto de ese sedante desaparezca.--

--Or...Orff.-- siguió balbuceando.

--¡Ese imbécil ya está muerto!.-- respondió con gesto terrible.

--¡Aquí estoy!.-- dijo el suizo entrando precipitamente acompañado de Mila y de Yura.

Viktor se alejó dejando el campo libre a Chris que enseguida sacó de un maletín sus instrumentos médicos para cuidadosamente hacer una revisión general al nipón no sin antes ordenar que Mila y Yura salieran de la habitación pues era lógico que el peliplata prefieriera mantener la privacia de su pareja ya que esta aún seguía desnuda.

--Ojalá supiera exactamente lo que le administraron.-- dijo Chris.

--Encontré esto en la cocina del alcalde.-- Viktor sacó de su chaqueta un fragmento de una caja de cartón.

--midazolam.-- leyó en voz alta.-- si lo sospeché.-- dijo el suizo con una disimulada preocupación.

-¿Crees que Orff logró...?.- el ruso detuvo su pregunta antes de terminarla ya que era algo que ni siquiera quería pensar.

-Al parecer no pero...eso te lo aclarará en cuanto recupere por completo la consciencia.-

El ruso se sentó sobre un sillón viendo fijamente como Chris inyectaba un médicamento en el brazo del nipón.-- Si realmente ocurrió no quiero ni pensar en lo que Yuuri sufrirá para superarlo.--

--Sería una situación difícil es cierto pero...con tu apoyo lo superará, de eso estoy seguro.-- lo animó el suizo.-- Bien, este medicamento se llama clorhidrato de naxalona, creo que será suficiente para contrarrestar el efecto del sedante.--

--¿Cuanto tardará en hacer efecto?.--

--Casi de inmediato, según sea necesario le aplicaré mas dosis después de eso podría decirse que estará bien, no encontré ninguna lesión de consideración.--

Chris se sentó igualmente sobre un sillón atento a la reacción del pelinegro y sólo en un par de ocasiones repitió el procedimiento revisando a la vez su presión arterial y su respiración. Viktor por su parte se mantuvo en silencio sumido en los sucesos recién vividos y que habían dejado uno de los peores episodios de su vida.

--Vitya.-- dijo de pronto Yuuri con voz bastante clara.

--¡Yuuri¡.-- el peliplata se levantó de un salto para acercarse a la cama mientras tomaba la mano del nipón.-- ¿cómo te sientes?.--

--Tengo un poco de náuseas.--

--Eso es un síntoma común.-- contestó el suizo en cuyo rostro se podía ver claramente el alivio.

--¿Te duele algo?.-- insistió el ruso con preocupación.

--No, sólo siento mi cuerpo adormecido.--

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