𝔻𝕚𝕠𝕤𝕖𝕤 𝕕𝕖 𝕝𝕒 𝕄𝕦𝕖𝕣𝕥𝕖 [Hanma Shuji x T/N]

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– ¿Y? ¿Estamos juntos? –Miraste por encima de su hombro.

– ¡Sí! ¡Los tres! –Hanma y tú abrieron los ojos.

– ¿Los tres? –Repetiste.

– ¡Sí!

– ¿Nosotros tres? –Hiciste un círculo imaginario con tu dedo índice señalándolos a ellos y a ti.

– Los tres. –Te confirmó Hanma con una sonrisa.

– Pero... ¡USTEDES SON MUCHO PARA MÍ!

– ¡YEI HANMA-KUN, ESTAREMOS JUNTOS! –Ignoró tu comentario y habló como niño.

– ¡Sí, los TRES juntos por lo que quede de éste lapso! –Habló en el mismo tono que el rubio.

– Pero... –Miraste a tu alrededor y te encontraste a la peliverde–. ¡Hayashi! –La mencionada te miró con una sonrisa–. ¿En qué sección estás?

– Estoy en... –Miró la lista–. Oh, en la misma que tú.

– ¡SÍ! –La contraria te miró confundida–. ¡No estaré sola con ese par de idiotas! –Ibas a abrazarla pero Hanma te detuvo.

– Idiota tú. –Te acercó a su pecho.

– Idiiti ti. –Reíste al sentir las manos del alto revolver tu cabello–. Deja, deja.

– ¿Se divierten? –Los cuatro se sobresaltaron al escuchar una voz detrás de ustedes.

– Es una cucarachaaa. –Le murmuró Haruki a la peliverde luego de alejarla un poco de los demás.

– ¿Una qué? –Acercó más su oído para escuchar nuevamente al chico.

– Una cucaracha, aparecen de la nada y te cagan el momento. –Repitió y añadió lo último.

– Pero si sólo es Fujiwara. –Hayashi no entendía la situación.

Por otro lado.

– Sí, nos estamos divirtiendo♡ –Contestó Hanma con una sonrisa que el tapaboca impedía ver, pero se notaba que estaba ahí.

– Umm. –Fue lo único que pronunció. Dirigió su vista a ti y le respondiste haciéndole muecas debajo del tapaboca.

– ¿No tienes algo más que hacer? –Preguntó el alto.

– Venía a ver en qué sección quedé. –Dijo con una sonrisa, pasó por tu lado y miró la lista sin quitar su gesto psicópata–. Tengo suerte, me tocó con Shuji-kun.

– La suerte de algunos es el infierno de otros. –Soltaste sin pensarlo y los dos chicos rieron.

– Sí, tienes razón, igual tengo que estar en el mismo salón que tú. –Te respondió mirándote a los ojos.

– Ah, si es por eso, me puedo cambiar de sección. –Te alzaste de hombros.

– Y yo me iré con ella♡ –Hanma dejó un beso en tu cabeza y se podía notar cómo a la peliazul se le asomaba una vena en la frente.

– Hablando de irnos, debemos ir al salón. –Le hiciste una señal a Haruki con la cabeza y éste llegó a tu lado seguido de la otra chica. Los cuatros caminaron en dirección contraria dejando atrás a la peliazul.

– Eh, ¿Qué pasó? –Cuestionó Hayashi.

– ¿Con qué? –Contestaron los tres al unísono y la chica se detuvo.

– ¿En serio? –Se miraron entre sí–. Hablo de Fujiwara.

– Ahh, la loca. –Hiciste una mueca con el rostro que le dio algo de gracia a la chica.