𝔻𝕚𝕠𝕤𝕖𝕤 𝕕𝕖 𝕝𝕒 𝕄𝕦𝕖𝕣𝕥𝕖 [Hanma Shuji x T/N]

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– Esa moto es genial. –Se paró y se acercó a los demás, al estar más cerca se percató de quién manejaba–. ¡____ ya vinieron por ti!

Abrí mis ojos lentamente y vi a lo lejos a las personas, me levanté y fui con el rubio–. ¿Dónde está Hanma? –Él solo señaló entre la multitud, asomé mi cara entre los hombros de varios chicos y abrí los ojos al ver a Hanma sentado en la moto, éste se estaba quitando el casco y dejó ver su sonrisa. Fruncí un poco mi ceño al ver que llevaba puesto mi suéter favorito, aunque el pantalón no parecía ser mío.

Pasé entre las personas, una de ellas era la loca de Fujiwara, ella tenía una mirada asesina; tuve que aguantar mis ganas de golpearla para no meterme en problemas. Llegué al centro de atención de todos y Hanma me saludó para luego extender un casco parecido al suyo, eran de color negro con gris.

– ¿Es tuya? –Tomé el casco.

– Sí, estaba en el mecánico, ¿Te gusta?~

– No está mal. Chifuyu casi nunca me dejaba montarme con él en la suya. –Miré de reojo y ya las personas se habían ido excepto por la fastidiosa y Haruki.

– ¡Wow Hanma-kun! Llévame contigo también. –El rubio saltó sobre Hanma y este se quejó.

– No. Quítate de encima. –Intentaba alejar a Haruki pero parecía un chicle viviente.

– Shuji-kun... Ten cuidado de no tener un accidente.

– El accidente lo tendrá si está cerca de ti. –Dije volteando los ojos y el bicolor me miró–. Haruki, déjalo, me harás llegar tarde. –El mencionado hizo caso y se alejó.

– Ya que Hanma-kun está aquí me puedo ir, disfruten de su salida y saludos para tu hermano. –Habló para salir corriendo de la escuela.

– Yo me voy, espero tengas un buen día, Shuji-kun. –Sonrió y empezó a caminar en dirección contraria a la del rubio y nuestra.

– Psicópata de mierda. –Bufé y me coloqué el casco.

– ¿Estás celosa?~

– No, jamás. Pero ahora esa tipa me persigue por tu culpa. –Me monté en la moto detrás de él.

– ¿Y ahora que hice yo para que sea mi culpa? –Volteó la cabeza para verme.

– Seguramente nada, pero aquella chica loca me ve como "rival".

– ¿Rival? Nadie es rival para ti~

– Cállate, tampoco es como si fuera una competencia para tener tu atención. –Le di un golpe en el casco con mi mano.

– No es competencia y aun así vas ganando. –Rio para después encender la moto–. ¿A dónde vamos?

– Chifuyu me dijo que lo viera en el parque de la otra vez. –Pasé mis brazos alrededor de la cintura de Hanma.

– Atrevida.

– Prefiero ser atrevida que terminar en el piso aplastada.

Finalmente arrancó, la moto pasaba entre las calles dejando a varios autos detrás, la sensación de la brisa en mí piel, la calidez que me brindaba la espalda de Hanma, ver a las personas y autos pasar tan rápido por alguna razón todas esas cosas me tranquilizaban. Cerré mis ojos para poder apreciar mejor ese momento, hasta que me quedé dormida sin darme cuenta.

– ____, llegamos. –Hanma apagó la moto y se iba a bajar de esta pero no pudo ya que la chica no lo soltaba–. ____... ¿___? No me jodas, ¿En serio te dormiste? –Separó los brazos de la contraria de él y vio como casi cae al piso por no poder sostenerse al estar dormida. Casi porque un chico que salió de la nada la sostuvo.

– Hanma Shuji. –El contrario reconoció la voz e hizo una mueca–. No vuelvas a dejar que esto pase, se pudo haber lastimado. –Cargó a la chica que seguía durmiendo.

– No sabía que realmente estaba dormida, no hagas tanto drama, Draken. –Se acercó al mencionado para cargar a ____ pero éste se echó para atrás evitándolo, Hanma al notar esto frunció el ceño.

– Casi la dejas caer, no dejaré que la cargues y agradece que Chifuyu me haya dicho que ahora ustedes son cercanos, por mí te hubiera partido la cara al verte con ella. –Al terminar de hablar caminó con la chica en su espalda hacia un grupo de chicos. Hanma lo siguió molesto–. Chifuyu, aquí está tu hermana.

– ¿Se durmió? Me recordó a Mikey. –Habló el rubio y se acercó a los tres que acaban de llegar–. ____ Despierta. –Movió el hombro de la mencionada pero no respondió–. Vamos a comer, despierta.

– ¿Qué vamos a comer? –Todos se extrañaron al escuchar dos voces decir esto, una era de la chica que cargaba Draken y la otra era del rubio que se columpiaba.

– Durante todo este tiempo que pasó ella con nosotros y solamente se le tuvo que pegar la personalidad de Mikey. –Dijo Mitsuya entre risas.

– ¿Qué vamos a comer? –Me bajé de la espalda del alto y pasé mis manos por mi cara–. ¿Cuándo llegamos?

– Llegaron hace poco, pero te quedaste dormida. –Dijo Draken.

– Dejen de hablar tanto y respondan, ¿Qué vamos a comer? –Mikey dejó de columpiarse para estar al lado de la chica.

– Vamos a ir a McDonald's. –Mikey y yo sonreímos alegremente. De repente todo mi sueño se fue.

– ¡Yo quiero la cajita feliz! –Dije mientras daba pequeños saltos. Hanma me miraba sonriente.

– ¡Yo también! Hay un nuevo juguete. Kenchin, si consigo ese juguete tendré completa la colección. –El rubio de cabello largo empezó a caminar hacia el lugar sin dejar de sonreír, el más alto lo siguió en silencio.

– Vamos Hanma. –Lo jalé de la muñeca y llegué al lado de los otros dos.

– ¿Quién se supone que va a pagar por todo? –Preguntó el bicolor viendo a Draken.

– Después decidiremos. ¡Chifuyu, Mitsuya, muévanse o los dejamos!

– ¿Acaso se les olvidó que teníamos que esperar a los demás? –Suspiró el cabello lila y caminó hacia ellos seguido de Chifuyu.