Si las mentiras fueran las despedidas [Editanto]

Cap 5: Solo por hoy

Lucas

Después de un día exhausto de clases, logré por fin terminarlas. A penas la última clase culminó decidí ir a ver a Victoria. Me preocupaba saber que algo le había pasado y si ese no era el caso, al menos ir a visitarla. Sin embargo, mi cabeza no ayudaba mucho, habían demasiados recuerdos que prefería evitar volver a sentirlos, solo rogaba porque todo estuviera bien. Y que este sentimiento de nervios sea solo por mis ideas locas.

La caminata desde el instituto hacia su casa se me hizo larga, hasta que decidí trotar para llegar más rápido pero con una mochila en la espalda no era algo sencillo.

Apenas pude divisar la casa a lo lejos, una sonrisa apareció en mis labios. Cuando estuve al frente de la puerta, toqué de ella pero me encontré con la sorpresa de que no había nadie.

Me quedé esperando con la posibilidad que de alguien lo hiciera, pero nadie abrió. Al cabo de una hora, logré rendirme y me fui a casa, la llamé una y otra vez, le escribí y le pregunté cómo estaba, más... no respondió.

¿Dónde estaba?

♤

Llegando una vez más al instituto con el lio de mi pensamiento invadiendo mi cabeza me percaté de algo. No solo del hecho de que habían más personas en el pasadizo que otro día, sino los murmullos, risas y miradas extrañas que se dedicaban.

Fue extraño... pero decidí pasarlo por alto. Me encontraba muy cansado por no dormir, así que quería solo ir hacia la clase de literatura. Y después, buscar al pelirrojo para llenarle de preguntas, que espero tengan respuestas.

Tomé asiento en una de las sillas, dejé mi mochila y me estiré un poco.

-Lucas - mi bostezo fue interrumpido por Luis. Pero fue su rostro preocupado lo que más llamó mi atención. - ¿Te has enterado? - negué.

-¿No lo sabes? ¿En serio? - su asombró encendió mis alertas.

¿Qué estaba ocurriendo?

-... es lo que más han estado hablando desde ayer por la noche.

-¿A qué te refieres? - seguía sin comprender.

-Lucas... - se acercó Sam, preocupado y... ¿alterado?

Las grandes bolsas bajo sus ojos delataron algo y fue exactamente a lo que me temía.

-¿Qué pasó con Victoria? - me acerqué sosteniendo sus hombros y los moví bruscamente cuando no respondió.- Sam... por favor respóndeme -suplique, la preocupación aumentó y los nervios igual.

-Tranquilízate, ella ya está bien - respondió Luis preocupado por mi reacción. - Solo sufrió un accidente, nada... ¿Qué haces?

Ignoré lo que decía, y prefería guardar rápidamente mis cosas.

-¿Dónde es? - espeté hacia el pelirrojo con la mochila en mano.

-El mismo lugar que en la anterior vez - susurró bajando la mirada avergonzado.

Sin esperar mucho salí del aula, escuché algunos gritos de parte de Luis, pero los ignoré.

No podía estar pasando, todo estaba bien. ¿Por qué...?

Mi mente estaba llena de teorías sobre lo que había pasado, una más cruel que la otra, ocasionando que corriera más rápido hasta la salida.

-¡Lucas, espera! - Sam agarró mi brazo tratando de detenerme.

-¿Sabes que pasó? - me gire para recibir una respuesta de su parte.

-Ella... - su voz tembló - la encontré inconsciente en su cuarto... - Pauso un momento. - Tirada en el suelo... ella estaba muy lastimada, tenía heridas... sus brazos tenían rasgones y... - dejó de hablar para mirarme, sus ojos estaban luchando con salir o escapar alguna lágrima, - parece ser que trató de ahogarse, ya que estaba mojada... - se calló y pude notar que eso no era todo.