C - 16

176 23 0
                                    

Apenas llegó la hora Jeon comenzó a alistarse y justo a tiempo, pues cuando se terminó de amarrar el zapato Tae le llamó.

– Esto va sonar de doble sentido.– empezó sacándole una risa a su novio.– Tengo la casa sola.– dijo con voz lenta y seductora haciendo que un cierto pelo pitufo se mordiera el labio emocionandose.– Pero al punto. Pensé en pasar la tarde aquí, viendo películas y estando juntos... A menos que tu tengas otros planes.– JungKook se cambió la camisa por otra mas holgada y un suéter sonriendo bobo al mirarse al espejo.

– Ese es el mejor plan que he escuchado.– Tae celebró.– Iré a comprar algo y voy a tu casa, bonito.– escucho la aceptación de Kim y colgó.

Ahora con el suéter amarrado en su cintura tomó camino hacia una floristería, queria darle un detalle a su lindo niño. Miraba las flores hasta que algo fuera de serie tomó su atención, la anciana que atendía el lugar también vendía coronas de flores, muy bellas en realidad, así que justo cuando la iba a llamar una voz lo hizo voltear, ninguna conocida pero igual la curiosidad tomó el control.

–Eres un inútil, vienes a comprar flores y ni dinero tienes, me haces perder el tiempo.– al parecer un señor también atendía pero como vendería si trataba así a todos los clientes.

El niño que aparentaba tener entre seis o siete años bajó la cabeza avergonzado y triste al mismo tiempo, y eso provocó que la sangre en el cuerpo del peli azul hirviera con enojo, poniendo la mente fría y calmandose compró tanto la corona de flores para su amor y un ramo muy bonito para el niño. Vió al chico que ya se había alejado y tomó carrera para alcanzarle.

– ¡Hey!– llamó su atención haciendo al pequeño voltear.– Este... Escuché la conversación y me pareció de muy mal gusto lo que te hizo ese hombre.– vió el ramo en sus manos y se lo tendió con una sonrisa.- Toma, lo compre para ti.

El niño al que ahora detallaba bien le brillaron los ojos dándole el dinero que tenía en sus manos.

– ¡Muchas gracias!– aceptó el bello ramo pero Jeon no aceptó el dinero.– Se que no es mucho pero es lo que tengo, aceptalo por favor.– al ver la carita de ángel que tenía el chico tomó el dinero guardandoselo en el bolsillo.

– Oye.– llamó JungKook antes de que el chico volviese a tomar su rumbo.– ¿Para quién son las flores?

Ante la gran sonrisa del menor suspuso que seguramente era para alguna chica, o quien sabe, para otro chico, la juventud de hoy en día es rara. Pero la respuesta que recibió no se la esperó ni en lo más mínimo.

– Para mi mamá.– sonrió en grande.– Yo le diré que fue usted quien me ayudó, seguramente ella en el cielo estará muy agradecida.– eso partió, martillo e hizo añicos el corazón del mayor.

– O-Oh.- tartamudeo.– No hay de que.– esbozo una triste sonrisa y una voz masculina ajena llamó al chico.

– ¡Kalix!– llamó el hombre.– Hijo vamos, hay que visitar a tu madre.

Este asintió y se despidió de JungKook.– Papi ese chico compró las flores para mi mamá.– contaba con alegría.– No me quisieron vender nada porque era poco dinero pero el chico me ayudo.– el hombre observó a JungKook y se acercó a él.

– Oye muchacho. Muchas gracias.– le sonrió en grande haciendo una leve reverencia.– Hoy es el aniversario de mi mujer y corto de dinero.– observó cómo su hijo veía las flores ilusionado y feliz.– Él de verdad quiere darle las flores a su madre y tu me has ayudado como no tienes idea con ese simple gesto.– Jeon sonrió negando.

– De verdad no es nada, y lo siento tanto por su pérdida.– él hombre rió tristemente y volvió a agradecer yéndose por fin con su hijo de la mano dejando a un JungKook con un sentimiento entre felicidad por haber ayudado a alguien y tristeza por lo pequeño que era el niño y que este con toda su inocencia le llevase flores.

Como conquistar a tu Crush || KookTae ||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora