Gaia
Despierto algo desorientada, froto mis ojos a la vez que siento unos brazos rodeando mi cuerpo, quito con cuidado de encima de mi cuerpo y me fijo en la hora del reloj que hay sobre la mesita de noche, apenas son las cuatro de la mañana, me levanto de la cama sin hacer mucho ruido, miro a Nathan desde aquí y me tomo el atrevimiento de hacerle una foto dormido, había luz ya que había tenido que encender la luz en forma tenue, sonrío y me meto en el baño para hacer mis necesidades, cuando salgo suspiro y abro la puerta de la habitación y bajo hasta el salón, y rio levemente llamando la atención de Koda que estaba dormido junto a Thor, viene hasta mi y acaricio su pelaje para dejar que vuelva a la cama y yo camino hasta la cocina, abro la nevera buscando algo para comer ya que de verdad me había entrado hambre.
Al final me cojo un yogurt y me siento en la cocina para comérmelo, lo hago despacio ya que Nathan está dormido y no creo que despierte, aprovecho la soledad de la cocina para pensar en lo ocurrido allí arriba, jamás había pensado que Nathan estaba sintiendo algo por mi, y tampoco pensaba que iba a querer tener una relación después de lo que me contó Bruno, pero como una vez me dijo mi madre, la vida te da sorpresas cuando menos te lo esperas, y vaya que tenía razón, obviamente quería estar con el, también correspondía a los sentimientos que el sentía hacía mi ya que yo también lo sentía hacia el, pero quien cojones me iba a decir que me iba a decir todo eso justo cuando yo estaba a punto de correrme, vaya que me estaba costando concentrarme en lo que me estaba diciendo, sonrío por las palabras que me atreví a decirle, no soy una mujer que se esconde pero Nathan me intimida, no de mala manera si no buena, pero eso hace que yo me sienta un poco cohibida de decirle ciertas cosas.
Me levanto una vez termino de comerme el yogurt y dejo la cucharilla en el fregadero con un poco de agua para cuando nos despertásemos pudiese fregarla, justo cuando salgo de la cocina veo a Nathan bajar rápidamente las escaleras y cuando escucha el ruido de la puerta cerrándose se gira hacía donde estoy y veo que está sudado, suspira y pasa las manos por su cara, me acerco a el y cojo su mano.
-Nathan ¿Qué te pasa?
El me abraza y yo se lo devuelvo sin pensarlo un segundo, y beso su pecho.
-Dios pensaba que te habías ido Gaia, yo e tenido un sueño horrible y me e despertado y no te he visto en la cama.
Lo veo tan mal que le doy un leve beso.
-Nathan estoy aquí ¿Si? No me voy a ir ¿De acuerdo? Cielo santo Nathan, aun que hubiese tenido el pensamiento de irme te lo hubiese dicho.
Digo y acaricio su pecho, tomo su mano y la estiro mientras camino hacía las escaleras.
-Venga volvamos a la cama, solo me desperté y me entró hambre así que vine a comerme un yogurt.
Miro hacia el y aun que asiente lo veo como pensativo, una vez llegamos a la habitación cierro la puerta cuando el pasa y nos tumbamos en la cama, me pongo boca arriba y Nathan apoya su cabeza en mi vientre haciendo que quede mas bajo que yo, suspiro y comienzo a acariciar su cabeza, masajeándola, yo siento su dedo acariciar mi cintura.
-Nathan lo que sea que estés pensando déjalo de lado por favor, estoy aquí, contigo, y no pienso irme a ningún lado.
El vuelve a asentir y sube hasta donde yo estoy, me coge en brazos y me hace ponerme encima de el pero tumbada.
-Nathan voy a aplastarte, déjame bajar.
El no desiste, y mantiene sus brazos alrededor de mi cuerpo.
-No digas tonterías, no pesas nada.
Río levemente y beso su clavícula y apoyo mi cabeza en su pecho.
-No se lo que hayas soñado, pero estoy bien, estamos bien.
Digo para dejárselo claro y que despeje su cabeza, el me abraza de nuevo, y aquí estoy viendo al verdadero Nathan, lleno de miedos y temores, cierro los ojos.
Cuando despierto nuevamente ya entra luz por la ventana, y cuando miro la cama esta vez quien no está en ella es Nathan, me pongo mi camiseta y salgo solo con ella puesta de la habitación, bajo las escaleras y me llega el olor del café, sigo bajando y voy hasta la cocina, allí esta Nathan preparando el desayuno y a Koda y Thor detrás de el, se encuentra de espaldas a mi por lo que me acerco a el y le abrazo desde atrás besando su espalda.
-Buenos días.
El se gira entre mis brazos y besa mi frente.
-Buenos días preciosa, estoy apunto de terminar el desayuno, ve a sentarte y ahora voy yo.
Asiento y me siento en la mesa americana que hay en la cocina y le miro desde donde estoy, veo como sus músculos se tensan cuando hace un par de movimientos, muerdo mi labio y el se gira mirándome.
-Pervertida... deja de mirarme el culo.
Rio y niego.
-Eres un creído, yo no estaba mirando tu culo, yo estaba mirando tus músculos.
El también niega divertido y viene con dos platos hasta donde estoy y los deja para después traer los vasos, miro los platos y tienen tostadas con mantequilla y mermelada de fresa.
-Gracias por el desayuno, ¿Qué harás hoy?
El se encoje de hombros mientras muerde la tostada.
-La verdad es que pensaba cogerme el día libre, quiero pasar el día con mi novia.
Me quedo a medio morder la tostada al escuchar eso y le miro a los ojos, mis ojos se humedecen y el besa mi mejilla.
-¿Que te parece Gaia, quieres pasar el día conmigo?
Bebo un poco de café antes de contestarle ya que sentía que se me había secado la boca.
-Por supuesto que quiero pasar el día contigo, hay un montón de cosa que podríamos hacer.
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Bueno aquí esta otro capitulo de nuestros maravillosos personajes.
¿Cuál creen que fue el sueño de Nathan y por que estaba tan afectado?
Creo que Koda y Thor se van a llevar tan bien que si los separan se van a extrañar.
No olviden comentar y dejar su voto para que la historia llegue a más personas.
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Mi mundo de color negro (+18)
RomanceGaia ha tenido muchos obstáculos en lo que lleva de años, tras la trágica muerte de sus padres Gaia tiene que salir adelante y estudiar un carrera para ganar dinero, transcurridos 5 años pudo empezar a trabajar de lo que ella siempre soñó, empezó a...