TE ODIO, PERO TE QUIERO (Del Odio Al Amor Hay Solo Un Paso) #1

15. SOMOS LOCOS ENAMORADOS

1/2 Maratón

Me acabo de ir de casa de Kilian, me he pasado casi toda la mañana allí. Hemos acordado que les diríamos lo nuestro a nuestros padres mañana, en una cena que han organizado ellos. Abro la puerta de mi casa.

- Hola mamá! - grito desde la puerta de casa.

- Anne, que te he dicho sobre esa manía que tienes de gritar las cosas desde la otra punta de la casa? - me dice mi madre que al parecer estaba en el salón.

- Que no grite y que vaya a decírtelo donde sea que estés - digo.

- Muy bien, y si lo pones en practica? - me dice mi madre - El otro día no me dejaste terminar de hablar.

- Porque ya sabía que me ibas a decir - le digo.

- Bueno, dejemos el tema, mañana vienen los Walter a cenar, compórtate por favor - me dice mi madre.

No sé si podré hacer lo que me pides... No sé si podré resistirme a besar sus labios...

- Anne, me estás escuchando, no estarás preparando una broma para Kilian, no? - me dice mi madre.

Estoy planeando de todo menos una broma, no te preocupes mamá.

- No, tu no te preocupes.

- Que no me preocupe dice - susurra mi madre por lo bajo.

- Me voy a mi cuarto - le digo.

Ya en mi cuarto me cambio de ropa, me siento en mi cama, apoyada en el respaldo, le envío un mensaje a Elena y Josh diciéndoles que debo contarles algunas cosas. Estoy distraída con mi móvil, cuando veo una silueta en el balcón dando pequeños golpecitos a la puerta de cristal. Me levanto y voy a abrir.

- Hola - me dice Kilian y me da un beso en los labios.

- Hola, que haces aquí? - digo en medio del beso.

- He venido a verte - me dice besándome otra vez.

Sus besos son los mejores.

- Te he echado de menos - me dice Kilian entre besos.

- Yo también te he echado de menos - digo.

Somos locos enamorados...

Kilian levanta mis piernas y hace que se enreden alrededor de su cintura, seguimos besándonos y de un momento a otro estoy tumbada en mi cama con el encima de mi.

- Deberíamos parar - digo entre besos - mi madre está abajo - le digo.

- Deberíamos - dice siguiendo con los besos.

- Kilian...

- Esta bien - dice sentándose bien en mi cama - es que estar contigo en una cama es una tentación a la cual no me puedo resistir.

- Eres un poco pervertido - de digo.

- Yo? Nunca - dice poniendo una mano en su pecho - aunque bueno, te recuerdo que tu esta mañana has querido repetir lo de anoche en la ducha - me dice y yo me pongo un poco roja.

- Ya, pero me lo has propuesto tu - le recuerdo.

- Buen punto, pero eso quiere decir que somos un poco pervertidos los dos - dice Kilian.

- Pues si, pero tu eres más pervertido que yo - le digo.

- Y eso como lo... - Kilian deja de hablar cuando oye la voz de mi madre llamándome.

- Anne! Baja un momento! - grita mi madre.

Ahora quien es la que grita desde la otra punta de la casa, eh? Si es que mi madre mucho quejarse, pero luego se contradice haciendo lo mismo de lo que se queja, si es que no hay quien la entienda. 

Kilian y yo nos miramos, nuestras miradas gritan "alerta roja, hora de abortar misión".

A ver, no es que pensemos que no aceptaran nuestra relación, es que se lo pensábamos decir mañana cuando estuviésemos todos juntos. Es que ahora sería en plan:

Mi madre: "Kilian, que haces en el cuarto de mi hija?"

Nosotros: "Estamos saliendo juntos, somos novios".

No sé, sería un poco raro.

- Ya voy! - le contesto a mi madre cuando logro reaccionar - Quédate aquí calladito - le digo a Kilian poniendo un dedo sobre sus labios.

Salgo de mi habitación en busca de mi madre. La encuentro en el salón, hablando con la vecina de enfrente. Es una señora mayor que vive sola, bueno, sola no, tiene tres gatos y unas cuantas plantas. Seguramente se ha pasado a saludar, es muy maja, para mi es como una abuela adoptiva.

- Oh, Anne cada día estás más alta - me dice dándome dos besos.

- Hola Rita, hacia mucho tiempo que no te pasabas por aquí - le digo con una sonrisa.

- Ah, si, es que he ido a visitar a mi hija y mi nieto - me cuenta, su hija vive en el pueblo de al lado.

- Como están? - le pregunto.

- Muy bien, la verdad. David (su nieto), este año ha empezado primaria y está muy contento - me dice Rita.

- Oh, que bien, hace tiempo que no los veo - le digo.

- Seguramente vengan en navidades - me dice - Por cierto, mi hija os envía recuerdos.

- Dales recuerdos de nuestra parte - le dice mi madre.

- Bueno, yo tengo deberes que hacer aún, mejor voy - les digo - Adiós Rita, espero que vuelvas otro día.

Me despido de ella con dos besos y subo a mi cuarto. Kilian sigue sentado en mi cama y cuando me ve se le forma una sonrisa en el rostro.

- Con que a hacer deberes, eh? - dice Kilian divertido.

- Nos has estado escuchando? No sé si te han dicho que escuchar conversaciones ajenas está mal, Walter - le digo.

- Si que me lo han dicho, pero quería saber porque tardabas tanto - me dice.

- No ha sido tanto tiempo - le digo.

- Va sonar cursi, pero... El tiempo sin ti pasa más lento - me dice Kilian.

- No ha sonado cursi, es cursi - le digo - pero me gusta como suena - digo y le doy un beso en los labios.

Él me devuelve el beso instantáneamente.

- Cuando llegan tus padres? - le pregunto cuando nos separamos.

- Dentro de media hora - me contesta - Porque lo preguntas? 

- Porque... Podríamos... Ir a tu habitación a hacer cositas - le propongo.

- Mira quien es la pervertida ahora - me dice Kilian y yo le pongo mala cara - Me gusta la idea, pero... Tu madre no notará que no estás en tu habitación? - pregunta.

- Está hablando con la vecina y hace mucho que no se ven, así que supongo que tienen mucho de que hablar - le digo.

- Entonces... Ven aquí - dice cogiendo mi mano. 

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Tranquilo todo el mundo, los detalles los daré en el próximo capítulo.