¡CARAJO!

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—Buenos días joven Lucier, le preparé el desayunó, un pan francés —dijo mi chef.

—Gracias Armando pero no tengo hambre, iré a visitar a Ashley, ¿podrías por favor decirle a Rafael que vaya preparando la camioneta?

—Claro que si —él se fue, me arreglé y bajé, nos fuimos a la casa de Ash, me abrierón la puerta y me dirigí al cuarto de mi princesa.

—Hola princesa... —al entrar vi una carta sobre la cama, yo la tomé y la leí...

— "Hola mami, creo que la que va a encontar la carta eres tú, ma tuve que salir por asutos personales, si ves a Lucier o llega a la casa no le digas nada de mi, trata de alejarte de él lo más que puedas, puede verse como la mejor persona del mundo, pero no lo es, necesito tiempo para mi, estoy segura que todos te van a cuidar ahí muy bien, espero poder volver pronto, con amor Ashley"

—¡Claro que me tendría miedo, soy un maldito MONSTRUO! —grité con todas mis fuerzas, me sentía inútil, no sé que debo hacer, no sé si buscarla es lo corecto, si darle su espacio, no sé que hacer, pensé que lo había tomado bien, pero ya vi que no lo hizo... Mamá por favor ayúdame, dije mentalmente, en cuanto dije eso el tiempo se congeló y mi madre llegó, yo como siempre corrí a sus brazos.

—Hijo... —me abrazó muy fuerte.

—Madre, yo... todo fue mi culpa nunca debí decirle nada ahora solo la alejé de mi, la perdí mamá y la perdí para siempre.

—Shhhh Kam, tranquilo mi vida, ya está mamá aquí —dijo mientras pasaba su mano por mi cabeza.

–Mamá... ¿Qué estoy haciendo? ¿Por qué esto de el amor duele tanto?

—Lucier tranquilo hijo, no estas haciendo nada mal, algún día ibas a tener que decirle y esta bien porque ahora ni tú sabes donde está ella así que por el momento ella está a salvo, ahora lo que tienes que hacer es terminar con tú plan, Luci te conozco y sé que vas a saber arreglar esto de una mejor manera, pero eso está en ti, en cuanto termines con eso ella volverá, en algún punto ella volverá, porque ustedes se aman y eso no va a cambiar nunca Lucier, vé y termina lo que empezaste...

—Mamá ya no sé si quiero terminarlo así... mi abuelo me dijo que si mataba a alguien no podría volver al paraíso.

—Lucier escuchame, yo sé que no podrás hacerle daño, sé que buscarás otra manera... pero aquí la decisión es tuya, y sé que solo vas a hacer lo que crees correcto para mantener al amor de tú vida a salvo y eso es aceptable, eso no esta mal... cuando tú padre y yo nos conocimos por primera vez todo era perfecto, yo sabía que haría cualquier cosa para mantener nuestra relación, estuvimos décadas juntos, después de un tiempo te tuve a ti... ahí yo estaba conciente que tú padre y yo éramos de mundos distintos, pero eso no me impidió amarlo con todo mi corazón... luego naciste tú y él quería que fueras malo, que supieras gobernar su reino, mientras yo quería que fueras amoroso, comprensivo... y me quedé contigo... tiempo después él llegó y te arrebató de mi lado, y mira...

—Ahora soy un monstruo —agregué.

—No hijo, ahora eres el mejor hijo del mundo, eres malo y eres bueno y eso te vuelve perfecto, porque aunque a veces tengas problemas siempre los solucionas, eres la mezcla perfecta de tú padre y mía, eres perfecto hijo y aunque fueras malo, aunque fueras totalmente bueno, yo te amaría igual siempre, al igual que tú padre te ama.

—Mamá ambos sabemos que el solo se ama a si mismo...

—Lo sé hijo... lo sé... pero con mi amor tienes y te sobra...

—Si mamá, garcias por venir —le di un beso en la frente.

—Lucier siempre estaré para ti... —ella sacó sus alas y se fue, el tiempo volvió a correr igual, yo me dirigí a la habitación de mi suegra.

—¿Se puede? —dije mientras tocaba la puerta.

—¡Hijo! Claro que si, pasa pasa —yo entré, ella estaba sentada en la sala de su habitación, me miró y estaba llorando, rápidamente la abracé.

—¿Todo bien? ¿Necesita algo? —dije un poco asustado.

—Hijo... son mis estudios médicos... —dijo mientras secaba sus lágrimas.

—¿Qué dicen? —ella me miró y sonrió.

—Estoy libre de cáncer —una sonrisa se plantó en mi rostro, la abracé muy fuerte...

—Entonces... ¿Qué le parece si hoy vamos a celebrar? —dije con una sonrisa muy grande.

—Me parece una gran idea hijo, solo deja me arreglo para la ocasión.

—Usted siempre se ve hermosa —agregué.

—Gracias hijo —dijo ella, le contesté con una sonrisa y me salí para que ella se pudiera arreglar, cuando salió me puse muy alegre, es la mamá de la mujer que amo y siempre a sido buena conmigo, le tengo mucho cariño a ella, extendí mi mano y ella la tomó.

—Perdón hijo pero no tengo mucho, es lo más bonito que encontré —pude sentir que se sentía avergonzada de eso.

—Se ve increíble, ¿sabe qué? Hoy no solo irémos a comer, esta semana será su día, la consentiré, la llevaré de compras, la sacaré a donde quiera, esta semana usted manda, yo solo voy a ser su acompañante.

—Ay hijo no te preocupes no es necesario —dijo ella.

—Claro que es necesario así que ya sabe, hoy yo seré su acompañante y él que va a pagar todo, así que no se contenga y usted tome y pida lo que quiera...

—Ay hijo, en serio no es necesario, mejor vamos por mi hija —había olvidado que la carta era para ella y no para mí, no quería mentirle pero la verdad es que tampoco quería que me tuviera miedo debido a lo que ella escribió, ella es lo más cercano que tengo a una familia aquí en la tierra, es lo más cercano que tengo a mi princesa y si, tengo miedo, tengo miedo de perderla a ella también, ya estoy perdiendo al amor de mi vida, perderla a ella ya sería un dolor insoportable.

—Mi princesa salió por cosas del trabajo, es que ahorita está trabajando en proyectos tenía que entrevistar a un doctor y acompañarlo en una cirugía y tengo un amigo que es de los mejores doctores del mundo... así que le llamé y ella estará con él en lo que termina su proyecto, pero no se preocupe jamás dejaría que algo le pasará a mi princesa, yyyyyyy mientras tanto usted lidiará conmigo —ella me abrazó muy fuerte.

—Gracias por todo lo que has hecho por nosotras, en serio te mereces el cielo, quiero que sepas que te considero como un hijo —dijo la mamá de Ash.

—No es nada, gracias a ustedes por llegar a mi vida, en verdad me cambiarón por completo en un mejor sentido y yo le prometo que siempre veré por ustedes dos —ella tomó mi brazo y nos llevó hacia la camioneta. Llegamos a la plaza y fuimos a comer.

—Gracias por la comida estuvo muy rica.

—No me agradezca por favor, todo lo mío es de ustedes... tengo una idea, ¿quiere ir al cine?

—Hijo disculpa mi ignorancia pero una pregunta, ¿qué es el cine? —me quedé impactado, estoy conciente de que venían de escasos recursos pero nunca imaginé que no sabría lo que era el cine.

—No se disculpe todos fuimos nuevos con esto del cine, el cine es un lugar donde puedes ver películas en una pantalla grande, vamos hoy le enseñaré —la tomé del brazo y nos dirigímos al cine.

LucierDonde viven las historias. Descúbrelo ahora