Es el gran enemigo principal de las aldeas.
Sanguinario y despiadado es aquella Bestia que ronda por las noches y los días, pero todo cambia cuando conoce a la chica del futuro que llegó del pozo de los deseos. Dicen que es la salvación. Y tal vez...
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Capítulo 6:
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La Bestia está aburrida y molesta porque Sesshomaru desafío su control, pues siempre se ha considerado la autoridad suprema.
Nadie es mejor que él y nadie puede ni debe desafiarlo. Así que decide hacerle una trampa al pobre humano que vive en su interior. Nunca había sido débil pero la sangre de aquella humana provocó que Sesshomaru hiciera de las suyas y ahora le toca a la Bestia defenderse o mejor dicho castigarlo.
¿Pero como podría hacerlo, tan sólo es una Bestia felina?
Existe el control mental del subconsciente. Y Yako puede entrar en los pensamientos del humano con cierta facilidad. Es escurridizo hasta en los sueños.
Y empezó actuar, con la pobre mente y deseos del humano.
Yako se va a divertir hoy.
Sesshomaru aprenderá la lección.
Lo ha inducido a un sueño perverso pero erótico.
Está soñando aquella mujer desconocida. Está desnuda, perfecta.
La sangre del humano hierve y quiere alcanzarla, tocarla, besarla, cogerla... Hace mucho que no está con una mujer y desea experimentar el contacto humano.
Yako sabe que la carne humana es débil y vulnerable ante sus deseos quizás algo enfermizos. La Bestia quiere averiguar que tan débil es ante esa mujer.
El sueño comenzó con un acercamiento físico, besando los labios de la humana con cierta delicadeza. Sesshomaru lo siente tan real que podría creerlo de esa forma.
La mujer le despoja sus prendas y el siente un enorme palpitar en su entrepierna. Las reacciones de su cuerpo son su condena exigen el poder del deseo y la pasión.
Yako se burla por la debilidad tan fugaz del humano y no puede evitar burlarse y decidió ver hasta que punto es capaz de llegar por esa desconocida que anhela por chupar su sangre hasta dejarla sin una gota. Drenada por ese sabor a hierro tan deseable. El humano por la carne y la Bestia por la sangre, sin duda la pobre chica no tiene escapatoria si se topa con ambos alguna vez.
