Es el gran enemigo principal de las aldeas.
Sanguinario y despiadado es aquella Bestia que ronda por las noches y los días, pero todo cambia cuando conoce a la chica del futuro que llegó del pozo de los deseos. Dicen que es la salvación. Y tal vez...
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Capítulo 8:
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La luz del sol esta vez se refleja por la rendija al tal grado que hacen despertar a la joven. A un costado duerme la pequeña niña sosteniendo su mano. La apartó con suavidad y se levantó silenciosamente. Salió de la pequeña casita y camina rumbo al pozo, por fortuna que posee un buen sentido de la orientación y pudo llegar a su destino... Lo sintió algo largo y pesado. Sin embargo nunca aflojó el paso.
Cuando llegó ahí y estuvo frente al pozo intento subir a la orilla para saltar dentro de él, sin embargo hay una sensación en su interior que la hace dudar de brincar y desconoce la razón pero hay un impulso extraño de pertenencia a ese lugar y además el poema de la Bestia ha quedado clavado con mucho más intensidad en su mente.
«¿Seré yo esa persona que tanto añoran?»
Un caos de preguntas inundan su cabeza.
«¿El poema habla sobre mi?»
Lo puede dudar con facilidad.
«¿Seré capaz de destruir a una Bestia que ni siquiera conozco?».
Es imposible...
Nunca ha sido especial e importante y lo sabe muy bien.
Tal vez no quiere volver porque allá no espera nada y no tiene nada más que una vida miserable, aburrida, complicada y llena de dolor. Sabe perfectamente que su madre está muy bien..., Sola, últimamente se la vivían en constante discusión.
«Debería quedarme», pensó dándose respuesta así misma. Por varias veces intento cruzar, pero el resultado es el mismo y se da por vencida. Paso un buen rato analizando la situación, quizás por varias horas hasta tal punto que llegara el atardecer consigo.
Se levantó del piso y decide regresar a paso lento. Total hoy es luna llena y el terror de todo el mundo no se presenta esa noche y aunque así fuera, la Bestia es buena excusa para el suicido que tanto añora pero que no ha podido lograrlo por mucho que lo intenta y es frustrante. Así pues Yako le daría una muerte lenta y quizá dolorosa o ardiente al momento que le clave los dientes pero será una muerte segura y sin esfuerzo. Obtendría el resultado perfecto.
