17. El control es algo demasiado importante.

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Eily

Me desperté y le vi a mi lado, yo estaba abrazada a él. Me levanté con cuidado para no despertarle, salí de la habitación cerrando la puerta. Bajé las escaleras y fui a la cocina, mi madre estaba allí.

-Parece muy majo.

-Sí, lo es.

-Parece que es el indicado.

-Bueno mamá, tampoco hace falta que digas eso, si no ha pasado nada.-Mentí.

-Vale, vale.

Me hice un café, y otro para él. Salí de la cocina y me lo encontré justo de frente, casi se me cae el desayuno.

-Veo que le he caído muy bien a tu madre-Dijo con una sonrisa arrogante-Pero al parecer no pasó nada, ¿No?

-Cállate, y entra-Dije mirando hacia atrás para ver si mi madre nos había escuchado. 

Le agarré del brazo y le arrastré hasta el final de la habitación. Después, me apoyé en la puerta soltando un suspiro.

-¿Acaso quieres que mi madre esté preguntándote cosas todo el tiempo?

-No, la verdad que no.

-Pues por eso le dije que no pasó nada. Además tampoco fue algo.

-Bueno, como tú digas...-Hizo una pausa de unos segundos, que para mí se hizo eterna- ¿Salimos?

Me sorprendió su pregunta, pensaba que estaba enfadado después de decir "Bueno, como tú digas"

-Sí, por qué no.

-Yo tengo un plan sorpresa, pero tengo que ir a mi casa a por ropa. No tengo nada aquí, aunque creo que va a ser mejor ir dejando cosas.

-Vale, pues quedamos aquí a qué hora.

-Pues a la una aquí.

Miré el reloj, eran casi las once.

-Está bien, luego nos vemos.

Se puso la ropa de ayer, y le acompañé a la puerta. No quería que esto pasase pero, justo cuando abrí, mi hermano se encontraba allí, con las llaves en la mano. Me miró sorprendido al ver a Josh ahí parado.

-¿Y este quién es?

-Adiós Eily, luego nos vemos.

Se fue, salió disparado.

-Nico, podrías ser más educado. Es un amigo, se llama Josh, creo que ya lo conoces.

-Perdón, y sí, creo que es uno de los chicos de baloncesto.

-Exactamente, bueno pasa.

Me aparté para dejarle entrar, cerré la puerta, y subí a mi cuarto. Tenía dos horas para prepararme, tengo que pensar que me voy a poner y todo eso, pero primero me tengo que duchar.

Al salir del baño, abrí mi armario de par en par, observé las prendas colgadas de las perchas con detenimiento. Vi una camisa azul claro, la saqué. Abrí uno de los cajones, revolví todo. Saqué una falda negra de tablas, y también vi un top blanco. Saqué unos calcetines largos y mis Air-Force 1 blancas. Lo puse todo sobre la cama, sería un outfit genial, o eso creo.

Me saqué la toalla de la cabeza, pensé que secarme el pelo antes de vestirme y prepararme sería mejor. Desenredé mi cabello con cuidado, y lo sequé. Me vestí y me miré al espejo. Faltaba algo: Maquillaje.

No me puse mucho, solo un poco de máscara de pestañas, delineador y algo de gloss. Estaba lista. Eran la una menos diez, me había sobrado tiempo y todo. Cogí un bolso pequeño, el mismo de la fiesta, metí mi móvil, recién cargado, mi monedero, y mis auriculares.

Enamórate de mí, JoshDonde viven las historias. Descúbrelo ahora