33. Buenas noticias.

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Nico

Estaba saliendo del trabajo e iba de camino hacia el hospital. No había ido en toda la semana. Desde que entré el Lunes y la vi así, pensé que jamás podría ir a verla hasta que despertara. Pero hoy se me han juntado todas las fuerzas para poder decir que si voy a ir. 

En cuanto terminé de hablar con Eily, sentí como que algo bueno iba a pasar. Sé que ella tenía una fiesta porque esta mañana me ha escrito diciéndomelo. Esa es una de las razones por las que voy al hospital. Ella necesita descansar un poco, y desconectar. 

Fui al McDonald's para coger algo de comida y tener algo en el cuerpo. Después de estar trabajando todo el día, acabé con hambre. 

Estaba llegando al hospital, y en el camino estuve preparándome mentalmente para ver a mamá y pasar el fin de semana con ella. 

Iba por los pasillos y me encontré con la doctora, la saludé amablemente, ella igual. Me di cuenta de que iba hablando con alguien mientras caminaba apresurada, me acerqué a escuchar. 

-Sólo necesito que me diga el número de la habitación y no tendrá que volverme a ver, de verdad. 

-No puedo dar información privada señor, lo siento mucho. Si quiere saber por ella, pregúntele a su hijo, que está ahí mismo.

La miré sorprendido, el hombre se giró y me di cuenta de que era mi padre. No era de extrañar. 

-Papá vete de aquí por favor, a saber qué le quieres hacer a mamá. Ya no es tu esposa, deja de hacer que te preocupas por ella. 

-Estoy preocupado por ella, de verdad. 

-Sabes perfectamente que todo esto es tu culpa, así que me harías un gran favor si desapareces, para siempre. Estoy cansado. 

-La verdad es que tampoco sé qué hago aquí. Me enteré de que estaba ingresada por sus problemas de corazón, que según vosotros, los causé yo. Y quería verla, pedirla perdón. 

-¿Sabes qué está en coma verdad?

-Estaba intentando informarme pero la señorita no me quería decir nada. 

-Disculpe, pero yo no le puedo dar información privada, y no soy idiota. Si se preocupase de verdad por su esposa habría venido el primer día posible al igual que sus hijos, y lo sabría todo. Váyase o llamaré a seguridad. 

Asentí mirándola agradecido. Papá se rindió y desapareció por  los pasillos echándome una mirada fulminante. 

Me despedí de la doctora y volví a lo que estaba, mamá. Ella no iba a despertar tan pronto, lo sabía, pero igual ir a verla podría ayudar. Dicen que las personas que están en coma escuchan y sienten, así que por intentarlo no pierdo nada. 

Cuando me quise dar cuenta, estaba frente a la puerta, dudando en abrirla o no. 

Acabé abriéndola, la vi allí, como si estuviese dormida, y aparentemente, mucho mejor que el primer día que la vi. 

-Hola mamá...-Dije cansado y sentándome al lado suya, comencé a contarle sobre mi semana-Estos días han sido horribles. Ver a Eily levantándose a primera hora para poder estar todo el día contigo me hace sentir mal, y no la culpes porque hoy no haya venido, pero necesita descansar, y tiene la fiesta de fin de curso hoy, así que bueno, se lo merece. 

>>En cuanto a mí, he estado trabajando de más para evadir los problemas, pero me he dado cuenta de que no eres un problema, sino que, tenemos un problema, y hay que solucionarlo. Y he pensado que ir a verte hoy, a lo mejor podría ayudar en algo, aunque lo dudo mucho la verdad. 

Enamórate de mí, JoshDonde viven las historias. Descúbrelo ahora