Aquella chica que es muy afamada por ser "La Diosa del viento" la primera mujer en una pandilla.
Aquella que es reconocida por su increíble sincronización con su hermano, Ryuzaki.
¿Podrán el leopardo blanco y Shinichiro, sanar esa herida que algun...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Pasado Lunes 14 de abril 1997.
Perspectiva Shinichiro.
Shinichiro y los chicos se encontraban vagando por las calles de Tokyo.
Hablaban muy normales hasta que Takeomi quiso ver el mundo arder.
-Waka-chan que tal vas con T/n- pregunto el de hebras negras, refiriéndose a la conquista que estaba llevando a cabo el peli-blanco.
-Bien, al menos ya no le molesta que le diga amor o que Ran y Rindou me digan papá- decía el peli-blanco despreocupado.
-Te gusta T/n-chan- pregunto el mayor de los Sano.
-Si, aunque no estoy muy seguro, me confunde mucho- contesto el oji-violeta
-Chiro a ti no te gustaba T/n-chan- Benkei acababa de exponer al oji-negro
-Shin eso es cierto- pregunto preocupado el oji-violeta.
-Si- murmuró en tono bajo él mayor de los Sano.
-Si es así discúlpame, no le volveré a coquetear- dijo Imaushi preocupado, sabía que su amigo no tenía suerte en el amor y talvez T/n podía aceptarlo.
-No te preocupes Waka-kun ella decidirá de quién enamorarse- dijo el peli-negro algo deprimido.
Se formó un silencio incómodo, la tensión en el ambiente era demasiada.
-PAPÁ- se escuchó el grito de un niño.
-Campeon! ¿Que haces aquí? ¿Y tú mamá?- pregunto Imaushi viendo a Rindou sentado en una banca en el parque.
-Fue a comprar unos helados y Ran se estaba peleando con un niño pero no dejo que me metiera- dijo el pequeño haciendo puchero.
-Bien, dime dónde está Ran- dijo el oji-violeta
-Se fue por allá- señaló Rindou una dirección y Takeomi se encamino hacia allá.
Después de unos minutos venía Ran con una gran sonrisa y un poco de sangre escurriendo por su nariz. Tu había llegado hace 15 minutos y tenías una mirada que a Ran le daba la impresión de que estabas molesta.
-Haitani Ran, que estabas haciendo- solo oír esas frases de tu boca género un escalofrío en todos los presentes.
-Me volvieron a molestar con que parecía niña y me puse a pelear- prefirió no mentirte, así evitaría problemas.
