bad ending

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Wakasa y Shinichiro estaban al borde de la muerte, nadie sabía si sobrevivir.

Un día por la tarde a T/n la llamaron del hospital, la peli-plata con temor respondió.

-Habla la señorita Momonori-
-Si, ella hablar-
-Necesitamos con urgencia que venga al hospital-
-Ya mismo voy para alla-

La peli-plata salió directamente al hospital donde estaban sus parejas internados.

Al llegar el doctor estaba esperando pacientemente a la peli-plata.

-Doctor Satori- llamaste.

-Pequeña, lamento decirte esto- hizo una pausa- hice todo lo que estubo a mi alcance, fallecieron hoy a las 2:25 de la tarde.

La peli-plata quedó en shock pero unos minutos después rompió en llanto. En esa sala de hospital solo se podían escuchar los gritos de dolor de T/n. El doctor Satori abrazo fuertemente a la peli-plata, siempre veía a personas así pero el se había familiarizado contigo de gran manera.

-Ya hija, ellos están en un lugar mejor- te aferraste a su bata y el te acaricaba la espalda.

-Papá…- dijiste mientras escondías tu cabeza en su pecho.

Ryuzaqui recibió la noticia unos minutos después y este salió de la mansión lo antes posible. Al verte en aquel tan deplorable estado las lágrimas se hicieron presentes.

Nagisa y Ryuzaqui se encargaron del funeral y el entierro. Ninguno podía dejarte sola en esos momentos.

Los niños al recibir la noticia quedaron en shock y con un nudo en la garganta. Los ojos de Manjiro perdieron su brillo y Kazutora estaba empezando a perder la cordura con tan solo un suceso.

El día del entierro T/n no tenía ni ganas de levantarse, Ran miraba a su madre y lo único que podía sentir eran ganas de llorar.

-Vamos mami, démosle un último adiós- dijo el rubio mayor.

-Si, hijo- te levantaste a como pudiste.

Los días pasaban y las noches era más largas, T/n tenía más de dos años sin dormir más de 1 hora. Poco a poco se estaba recuperando de la noticia pero no todo es bueno.

Un día cómo cualquiera Ryuzaqui entro a la habitación de la menor sin avisar.

-Hoy tengo que ir a la mafia y me va a acompañar Nagisa, cuida de los niños- aviso el oji-dorado, le dolía mucho ver a su pequeña así pero tenía que estar firme para ayudarte.

-Claro- T/n sonrió forzadamente y bajo al living.

Ella paso el día más tranquila en compañía de sus hijos, eso era lo que necesitaba. Manjiro no estaba bien y aunque quisieran llevarlo al psicólogo se negaba diciendo que no estaba loco.

En cambio, en las instalaciones de la mafia se encontraban Ryuzaqui y Nagisa, estaban bastante alertas ya que sentían que algo malo pasaría.

-SEÑOR MOMONORI- Grito uno de sus mejores subordinados.

-Que sucede- hablo con una voz fría.

-NOS ATACAN!- grito para salir rápidamente

-Vamos!- grito Nagisa cargando su arma

Los balazos no se hicieron esperar y todos veían como sus líderes mataban sin piedad a sus oponentes, pero no esperaban que tuvieran refuerzos.

La diosa De Las Pandillas. (Shinichiro x tu x Wakasa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora