Aquella chica que es muy afamada por ser "La Diosa del viento" la primera mujer en una pandilla.
Aquella que es reconocida por su increíble sincronización con su hermano, Ryuzaki.
¿Podrán el leopardo blanco y Shinichiro, sanar esa herida que algun...
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Estaban en la sala de parto, Shinichiro y Wakasa estaban dentro "apoyándote". Aunque Shinichiro se había desmayado dos veces.
-Vamos, puja tu puedes- decía la partera.
-No puedo!- gritaste y apretaste la mano de Wakasa.
-Tu puedes cielo- te dijo Shinichiro desde una esquina.
-No me digas cielo! Tu ni siquiera puedes a ayudarme en este momento Shinichiro Sano!- grito la peli-plata, estaba hablando incoherencias por el dolor.
-Vamos! Vamos! Ya veo la cabeza!- grito la enfermera.
-Tu puedes cariño!- grito Imaushi.
-Ahh! Duele!- grito la oji-dorada.
-Ya salieron los hombros- aviso la enfermera.- Felicidades es un niño.
Los dolores no pasaban.
-Ahora vamos con el segundo, estás lista- dijo la enfermera
-Solo saque a mi hijo de ahí.- ya no podías con el dolor.
-Malditos imbéciles! No me vuelven a embarazar!- grito la peli-plata entre lágrimas por el dolor.
-Vamos T/n! Ya viene!- grito la enfermera
Salieron los hombros y la enfermera lo tomo en brazos y lo envolvió en una manta para que los limpiaran.
-Es una niña- sonrió
A Wakasa no tardaron en salirle lágrimas de sus ojos violetas.
No sabían cuál era el sexo de sus hijos, no querían saberlo hasta el día del parto.
Terminaste de pujar y envolvieron a ambos niños en unas mantas.
Después de que lo limpiaran te lo entregaron.
El niño tenía los ojos dorados al igual que T/n, su cabello era blanco con mechas negras y tenía las pestañas largas al igual que Wakasa.
-Mirate que hermoso- dijiste besando su mejilla.
-Es precioso nuestro hijo- dijo Shinichiro
-Eres hermoso- hablo Wakasa sonriendo.
Cuando entregaron a la pequeña se podía notar que era más pequeña y sus facciones eran mucho más finas. Su cabello era gris, sus ojos tenían dos colores negro y violeta.
-Eres hermosa- dijiste admirando a tu hija.
-La princesa de papá- dijo Imaushi tomando a la pequeña en brazos
-Mi niña, eres hermosa- dijo Shinichiro observandola, el tenía en brazos a tu hijo
Dos semanas despuéste dieron de alta, permitiendo a los chicos llevarte a casa.
