Look at me

Capitulo 36

Jose Luis

¿Altagracia seductora? es digno de disfrutar! me dejo llevar por sus palabras, sus caricias van de arriba hacia abajo... se concentra mas en la ultima parte, y no me quejo cuando siento su lengua húmeda por mi erecto pene, debo afirmarme en el pomo de la puerta de la habitación principal, hizo todo el trabajo ella, me regalo un magnifico orgasmo, tuve que sacar su cabeza para no correrme en su boca, pero como la veía de excitada y prometedora, creo que eso no le hubiese importado absolutamente nada, sin embargo es algo que no hemos experimentado, por lo tanto fui prudente.

Se queda hincada en la alfombra, mientras yo paso al baño a asearme, una vez que estoy listo, salgo, sin quitar mi mirada de la suya, me quito la camisa, la dejo a un lado, ella muerde su labio inferior, saco todo mi pantalón y bóxer, me acerco, me inclino, beso su cuello y hago que se incorpore.

-Ahora falta la inauguración de la otra habitación...- le susurro al oído.

-La casa es grande...- dice con su voz llena de excitación, mientras caminamos voy quitando de a poco cada prenda, hasta dejarla desnuda, llegamos al otro cuarto y la apoyo en la pared.

-Aja...- beso su cuello, y aprieto sus senos- eso es lo bueno de inaugurar una casa- me inclino y paso mi lengua por sus pechos, primero uno y luego otro, mis manos vuelan a su húmeda vagina, esta mas que preparada para mi, la doy vuelta, ella se inclina un poco y beso su espalda, mientras voy bajando, llego a sus preciosos y redondos glúteos, es simplemente perfecta, instintivamente abre las piernas, es delicioso tenerla así, Altagracia es tan tímida, que difícilmente se deja estar en otras posiciones, sin embargo esta cambiando conmigo, y eso me gusta, mientras paso mi lengua por sus glúteos y acaricio su clítoris no dejo de imaginarla en la alfombra en cuatro, con su cola parada mientras la embisto, no tengo idea si se dejara, pero solo Dios sabe que la deseo de esa forma, y debo intentarlo, imperceptiblemente hago que se incline mas, hasta que dobla sus rodillas y queda en la posición perfecta, el pene me late, estoy duro y caliente, me arrodillo y quedo viendo como mi fantasía va tomando forma, abro mas sus piernas y queda totalmente expuesta, mira hacia atrás, su respiración esta agitada, se nota que esta mas excitada que otras veces y eso me fascina...

-Jose Luis..- no quiero que me diga nada, solo la quiero así, debe sentir confianza de su cuerpo.

-Shhh.. eres exquisita, como me pones Alti, tenerte así me tiene loco, juro que te haré disfrutar, porque te amo mi vida- solo escucho un gemido en respuesta, poco a poco la voy conociendo, y le gusta que le diga palabras así.

Me agacho y paso mi lengua por su vagina, veo desde esta posición sus senos hacia abajo, le doy placer, cuando ya no puedo mas, me incorporo y me posiciono, la penetro con delicadeza, ella da un grito de sorpresa, empiezo con mis embestidas lentas, no quiero correrme aun, debo tener mucho auto control para que eso no suceda, me quedo quieto unos instantes pegado a ella, para aguantar un poco, después aprovecho mi momento y empiezo con mis embestidas duras y profundas, Altagracia gime fuerte, se nota que le gusta, y yo estoy loco con sus pechos moviéndose a la par de mis embestidas.

-Ya no doy mas mi amor... quiero correrme.. por favor..

-Córrete, vamos Alti hazlo.. yo te sigo mi amor... hazlo.

Dos estocadas mas y la aprieto junto a mi, estoy todo sudado y para que decir ella, nuestras respiraciones agitadas empiezan a normalizarse poco a poco, una vez que nos calmamos, salgo de su interior, ella cae delicadamente en la alfombra, mientras yo hago lo mismo, nos quedamos en completo silencio, mirando el techo, luego movemos las cabezas, nos miramos y nos ponemos a reír.

-¡Esto estuvo magnifico!- le digo, se que a ella le gusto.

-No te negare que al principio me dio un poco de vergüenza, pero... gracias por todo el placer que me has dado hoy...- ríe.