XI. This Is Why We Can't Have Nice Things

751 97 32
                                    


CAPÍTULO ONCE
ESTA ES LA RAZÓN POR LA QUE NO PODEMOS LLEVARNOS BIEN

Barry y Tessa se adentraron en el despacho de Ralph Dibny, el cual se encontraba completamente desordenado y revuelto

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.



Barry y Tessa se adentraron en el despacho de Ralph Dibny, el cual se encontraba completamente desordenado y revuelto.

—Parece que ya han registrado esto—observa Tessa, pues todo ese desastre no podía ser causado por una sola persona—

—Sip—suspira Barry—Probablemente los que colgaron a Dibny de la azotea.

—¿Por qué habrá sido?

—No lo sé. Un tío así tendrá una larga lista de gente que quiere tirarle al vacío—comenta entrando en el lugar tras ella—

—Seguro que su lista no es más larga que la mía—bromea Tessa. Barry la mira con seriedad, no le gustaba que ella hablara así de si misma—Oh, venga, no soy una santa, Barry, lo sabes. Además mi apellido influye.

Barry asiente sabiendo que tenía razón en aquello.

—Bueno, cuando nos casemos tu apellido dejara de ser un problema—comenta acercándose a ella con una sonrisa tierna en sus labios, sin darse cuenta de que sus palabras no eran tan dulces como él creía—

—Eso no ha sido muy amable ¿sabes?—señala Tessa borrando la sonrisa de su rostro—

—Lo siento, tienes razón. No pretendía...

—Mi apellido forma parte de mi. Es importante—le interrumpe ella—No es algo de lo que quiera deshacerme.

No estaba enfadada, su tono de voz tranquilo lo demostraba, pero si estaba algo confusa y molesta por las palabras de su prometido.

—Si, lo sé. Y me encanta tu apellido—le asegura él con rapidez—Pero como vamos a casarnos... bueno, pensé que te lo cambiarías.

Tessa abre la boca dispuesta a responder, pero pronto vuelve a cerrarla cuando no consigue encontrar las palabras correctas. No es que no lo hubiese pensado, lo había hecho, pero no estaba segura de saber que era lo que quería. Tener el apellido de la persona a la que amaba era algo precioso, pero ella amaba tener el apellido de su familia. Era el apellido de su hermano. Y era el apellido de su padre, por muchas consecuencias malas que eso trajera.

—Dime, ¿por qué quieres tú tirar a Ralph al vacío?—el repentino cambio de tema sorprende a Barry, quien suelta una pequeña sonrisa ante su pregunta—No, lo digo en serio. ¿Qué paso entre vosotros dos?

Barry suspira con pesadez mientras ella revisa el lugar en busca de algo que pudiera darles una buena muestra de ADN.

—Fue uno de mis primeros casos. Cuando yo era un novato y Dibny era detective—comienza a explicarle mientras la ayuda a buscar—

—¿Qué caso?

—Pues una mujer llamada Judy Gilblim murió apuñalada. Su marido, Reagan, era el principal sospechoso, pero no había pruebas. Nada que le relacionase con el lugar del crimen. Y entonces, Dibny, milagrosamente encontró un cuchillo con las huellas del marido—le explica—Caso cerrado y ya teníamos un héroe. No sé, quizá porque mi madre fue apuñalada, quería asegúrame. Analice el cuchillo. El filo no coincidía con las heridas de la víctima.

𝐌𝐀𝐆𝐈𝐂𝐀𝐋 | Arrowverse [Barry Allen] #2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora