Demoilustrador

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Miré el pizarrón por tercera vez, no estaba entendiendo nada de lo que la maestra estaba explicando, hablando de ella, viene hacia acá.

¡Viene hacia acá!

—Nath. —golpeé su pierna.

—Nathaniel, despierta —lo removí.

Él dejó salir un sonido, sí, mi amigo estaba dormido.

—Nath —hablé por tercera vez y nada.

—¡Nathaniel! —la voz de la señorita Mendeleiev y el manotazo que dio en la mesa hicieron que me sobresaltara y despertaron al pelirrojo.

—¿Qué estás dibujando? —preguntó la profesora y le quitó su libreta a Nath—, estas son las razones por las que repruebas ciencias. —dijo y le regresó su libreta.

—Ve ahora mismo con el director y le muestras tus dibujos. —dijo con tono autoritario.

—¿Por qué no me dijiste que venía? —preguntó un poco dolido y en voz baja.

—Te hablé tres veces. —susurré.

—¡Sancoeur!, ¿Usted también quiere ir con el director? —volvió a exclamar.

Me acomodé en mi asiento. —N-no señorita.

Nathaniel se levantó y comenzó a caminar hacia la salida, la profesora iba detrás de él, el pelirrojo tropezó con la mochila de alguien, su libreta salió volando, nuestra profesora lo levantó, pero cierta chica tomó su libreta y vio lo que había en su interior.

—Ay mira Sabrina, es él como superhéroe, y mira a quien está salvando, es Marinette, está totalmente loquito por ella —Chloé dijo con su clásico tono burlón.

Nathaniel le arrebató la libreta. —¡Dame eso!

—¡Suficiente Nathaniel!, ¡Fuera! —exclamó la señorita Mendeleiev, solo vi cómo Nath salió corriendo del aula.

La clase prosiguió con normalidad, debíamos hacer un proyecto en equipo.

Lo bueno: No haría yo sola el trabajo.

Lo malo: La profesora elegiría los equipos.

No me gusta que hagan eso, luego no sabes si las personas con quiénes te toca sí cooperan o no.

—Alya, Juleka y Mylene. —anunció la profesora.

—Adrien, Nino y... —revisó su lista—. _______.

Levanté rápido la mirada, asentí y miré a los dos chicos, vi que Nino le daba leves codazos a Adrien, luego miré a mis amigas, Alix sólo me asintió, pues ella ya sabía lo que me sucedía y esto podría ser un avance para descubrir lo que siento, Juleka retuvo una risita y Rose parecía que quería explotar de la emoción.

Terminada la clase, guardé mis cosas y caminé a la salida pero alguien me detuvo.

—_____, ¿No quieres cambiar de equipo conmigo? —Marinette me cuestionó y juntó sus manos dando pequeños saltitos.

—Eh... No. —contesté, ella resopló y dejó caer su torso.

Me reí ante su acción. —Perdón, es que aún no me siento lista para trabajar con Chloé, apenas logré que me hablara bien. —expliqué, ella sonrió un poco.

—No te preocupes, te entiendo —dijo poniendo una de sus manos en mi hombro—, nos vemos luego. —dijo, sonreí y salí del salón.

Busqué a los que serían mis compañeros de equipo, al menos sabía que ellos sí trabajaban.

Logré divisarlos a unos metros de mí, así que decidí caminar hacia ellos.

—Cuando llegue, sólo actúa normal. —escuché que Nino le dijo a Adrien

Unidos Por Un Misterio (Chat Noir/Adrien y Tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora