CUARTA PARTE

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El diciembre había llegado a Londres y con él las vacaciones de invierno, Harry y Ginny se encontraban alistando todo para ir a recoger a sus hijos a la estación King Cross, llevaban consigo un poco de chocolate caliente en un termo y galletas hechas por Harry, en su bolsa Ginny llevaba una libreta con todo lo que tenían que comprar para las fiestas. Harry estaba seguro de que Albus se quedaría en Hogwarts para estar con Scorpius, pero se equivocó, al parecer el pequeño Malfoy tenía que pasar las navidades con su familia así que Albus volvía para pasar la navidad con ellos.

—¿Les seguirás contando lo de Draco? — preguntó Ginny saliendo de su casa.

—¿Crees que me dejaran en paz sino? —respondió Harry estirando la mano para recibir el termo con café que había preparado la pelirroja.

—Seguramente no. —respondió la pelirroja riendo. Harry cerro la cajuela del auto, había hecho un hechizo para que las maletas y las compras entraran perfectamente y ambos entraron al auto.

Harry había comprado ese auto hace un tiempo para poder llevar a su familia al Londres muggle y pasear por ahí, le gustaba llevarlos a ferias, centros comerciales, museos y parques, quería que ellos vivieran lo que Harry nunca pudo.

El camino a la estación fue bastante tranquilo, Ginny había puesto un álbum de jazz que Hermione le había recomendado y mientras le pasaba algunas galletas a Harry miraba a la gente hacer sus compras.

—¿Molly preparara galletas? — pregunto Harry mientras caminaba junto a Ginny a la estación.

—Esperó que sí, le dije a Mamá que nos preparara algo rico para cuando llegáramos. — dijo y tomo a Harry por el brazo.

Ambos entraron a la estación encontrándose con Hermione y Ron, quienes iban también por sus hijos, Harry sonrío y abrazo a Hermione, por lo complicado de sus trabajos era raro que se vieran, Hermione era ministra de magia y Harry y Ron aurores y aunque pareciera que trabajaran codo a codo la realidad era que se veían muy poco. Ginny por su parte después de retirarse del Quidditch por una lesión en el hombro, se convirtió en columnista del diario El Profeta en el apartado de deportes.

—Herms... — susurro Harry. —¿Cómo estás? —Hermione sonrió.

—Bien, algo cansada por lo de la renovación de las leyes, pero bien.

—Está haciendo un increíble trabajo. — dijo Ron saludando a Ginny. —¿Mamá te dijo si debíamos llevar algo?

—A sus nietos. —bromeó Harry y todos rieron.

Juntos entraron al andén 9 y 3/4, miraron a su alrededor, muchas caras conocidas de ex compañeros, Dean y Seamus se encontraban esperando a su hija adoptiva, miraron a Harry y se acercaron.

—¡Harry! —saludo Dean.

—¿Cómo están muchachos? —pregunto Ron dándoles la mano.

—¿Primer año de Hannah verdad? —pregunto Hermione.

—Si—respondió Seamus. —Estamos nerviosos, está en Gryffindor.

—Igual a sus padres— dijo Ginny sonriendo.

Cuando el tren llegó a la estación todos los padres se acercaron para recibir a los estudiantes que llegaban, Harry vio a Scorpius bajar e ir directo a donde se encontraba su madre, Harry la saludo con un gesto y ella respondió con una sonrisa.

—¡Papá! —gritó Lily corriendo hacia ellos. Harry la tomo en brazos y la levanto.

—¿Cómo te fue?

—¡Excelente, la directora McGonagall es un gato! — Harry sonrió al recordar como él había descubierto aquello.

Albus y James caminaban hacia ellos con el carrito lleno de sus cosas y las de Lily.

—Hola, pa. — saludo James.

—Estamos listos para que sigas con la historia. —dijo Albus sonriendo. Ginny se rio y abrazo a su hijo.

—Veo que tienen buena memoria.

—Albus no me dejaba de molestar con eso. —dijo James.

—¡Tú también quieres saber, no mientas! —dijo Lily

—¿De qué historia hablan? — pregunto Hermione tomando las cosas de Rose.

—Albus nos contó que el tío Harry les está contando sobre Draco Malfoy. — dijo Rose y saludo a Harry.

—Ahora es un chisme familiar. —comento Ginny entre risas.

—¿Qué les estas contando exactamente? —pregunto Ron mirando a Harry a los ojos.

—Prometo que no estoy hablando de más. —respondió Harry nervioso.

—¡Hola tía! — dijo Hugo a Ginny. —¿Me das una galleta?

Ginny sonrió y saco el envase de las galletas de su bolsa.

—Sabía que ibas a descubrirlas más rápido que tu papá. —dijo entregándole una galleta de chispas de chocolate.

—¿Entonces preparaste para mi también? — preguntó Ron mirando a su hermana.

—Las preparo Harry, —empezó a decir. —... pero si, hay para todos.— Los niños y Ron tomaron una galleta cada uno y le dieron las gracias a Harry.

—Yo también quiero una. —dijo una voz detrás de Albus.

—¡Molly! —exclamó Ginny. — Claro que si...— dijo mientras le ofrecía un par de galletas. —Llévale una a Lucy.

—¿Y Percy? —pregunto Hermione buscando al Weasley.

—Mi papá está acomodando las cosas en el carrito...— empezó a decir Molly—... pero me pidió que les dijera que la abuela dice que lleven más trastes porque este año estaremos todos en las cenas.

—¿Todos? —pregunto Harry. —Sera una gran celebración.

—Enorme...—comentó Hermione.

The Tear In My Heart - |DRARRY|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora