XVII

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Todo se oscureció, un frio recorrió la espalda de Harry y escucho pasos a lo lejos. Estaba en un salón grande con ventanas altas y una larga mesa en el centro. Draco entró por la puerta, su cara estaba demacrada, tenía un moretón en la mejilla y su tez estaba pálida; el corazón de Harry se estrujo y sintió un nudo en el estómago.

—¿Que te hicieron? — susurro. Tras el rubio entro su padre, Lucius Malfoy y Voldemort, las facciones del rubio se endurecieron y apretó los puños, Harry lo imitó.

—Draco Malfoy...—dijo Voldemort. —Alza tu varita.

—¿Qué? — cuestiono el rubio mirando algo en el suelo. Harry no entendía qué estaba pasando hasta que se acercó a Draco y logró ver a una persona tirada en el suelo con una bolsa de tela en la cabeza.

—El día de hoy realizaras para mí las tres imperdonables...

—Señor, pero...— interrumpió el padre del rubio.

—¡Cállate Lucius! —El señor tenebroso se acercó a Draco y le sobo un hombro, Harry sintió náuseas y se acercó al rubio, sabía que nadie lo vería, pero prefería estar cerca de él.

—Número uno: Imperio. —dijo Voldemort serio.

Draco tragó fuerte y miro a la persona en el suelo, asintió con la cabeza y susurro.


—Imperio...—Voldemort se acercó al oído del rubio.

—Pídele que se descubra la cabeza...

—Qui-quitate la bolsa de la cabeza. —esta obedeció, era una mujer castaña, tenía las mejillas salpicadas de pequeñas pecas, estaba sucia. Voldemort volvió a susurrarle algo a Draco.

—Acércate y arrodíllate. —La mujer obedeció. — ¿Cuál es tu nombre?

—Adhara Pólux—contestó la mujer.

—¿En dónde trabajas?

—En el ministerio de magia. — dijo con voz soñadora.

—¿Quién soy yo?

—Draco Malfoy, hijo de Lucius y Narcisa Malfoy.

—¿El quién es? — dijo señalando a Voldemort con la cabeza.

—Voldemort. — dijo sin expresión alguna.

—¿Cómo terminaste aquí?

—Yo fui quien arrestó a Lucius Malfoy.

—No lo encarcelaron— comentó el rubio confundido.

—Dijo haber estado bajo el maleficio Imperios...

—¡Basta de estupideces! —gritó Voldemort y pateo a la mujer haciéndola caer. —Número dos: Crucio

—¿Cru-Crucio?

—Se un hombre Draco. — escupió Voldemort. —Dilo fuerte y claro. Siente el poder en tus venas... Ella casi lleva a tu padre a Azkaban...

—No....Draco...—susurró Harry. Intentó tomarle la mano, pero fue inútil.

El rubio miro a la mujer, alzó sus varita, respiró profundo y dijo —¡Crucio! — El salón se llenó de gritos por parte de la mujer, pedía que pararan, Draco miraba con frialdad a la mujer, tenía los labios apretados y estaba luchando por no llorar.

Harry en cambio miraba horrorizado lo que estaba pasando, la mujer se estaba retorciendo en el suelo y el rubio parecía petrificado, sus ojos no transmitían nada, parecía estar vacío. Roto.

—¡Basta! —gritó Harry y trató de tomar las manos de Draco, pero solo lo atravesó. —¡Alto! —volvió a gritar y tapó sus oídos, los gritos de la mujer eran cada vez más agudos.

The Tear In My Heart - |DRARRY|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora