The Tear In My Heart - |DRARRY|

XXVI

El sonido del metro siempre le había parecido relajante a Harry, los trenes yendo y viniendo, los murmullos de la gente a lo lejos, la nula luz de sol que hacia parecer que las horas nunca pasaban y el olor a café que escapaba de las cafeterías dondé se encontraba, quería llegar lo antes posible con Ron pero también quería pensar en lo que podria pasar en los siguientes meses; Harry sabía que no podía solo con lo que estaba planeando para ayudar a Draco, decidió que tenía que contarle todo a sus amigos para que juntos pudieran idear un plan perfecto para conseguir información para derrotar a Voldemort, salvar a Draco de los mortifagos y salvar a Dumbledore de lo que sea que había planeado el Señor oscuro, no sabía si bastaría solo con ellos tres o tenía que pedirle ayuda a Sirius y Remus, aunque le habían recomendado mantenerse alejado de Sirius para que estuviera seguro y no lo usaran en su contra, lo bueno de la situación en el ministerio es que Remus se había mudado con Sirius a la casa de los Black para tener todo en orden, Harry sabía que algo estaba pasando con ellos pero no pregunto nada.

Salió de su ensimismamiento cuando sintió una mirada sobre él, miró de reojo y vio a Dumbledore al otro lado de las vías, le sonrío.

⧫

Draco se encontraba leyendo en la biblioteca, los libros que algún día vio que Hermione leía para la clase de defensa contra las artes oscuras, necesitaba prepararse, no sabía si Harry podría ayudarlo a idear un plan perfecto para salvar a Dumbledore pero él tenía su propio plan, haría ver como que Dumbledore y él habían tenido una gran pelea y él sería el que muriera, no podía permitir que le pasara algo al mago que podría ayudar a Harry a resolver todo ese lío.

—¿Draco?— se escuchó la voz de alguien desde la puerta de la biblioteca.

Su madre se adentro y encontró al joven rubio en la mesa con muchos libros alrededor de él, la miró y sonrió.

—¿Qué pasa madre?

—¿Por qué estás leyendo todo esto?— preguntó y tomó un libro.

—Tengo asuntos que resolver

—¿Qué está pasando Draco?— preguntó la mujer tomando asiento al lado de su hijo. — ¿Es sobre lo que te encargo El Señor Oscuro?

— Mamá...— susurró el rubio.

— Lo sé hijo...— respondió su madre acariciándole la mejilla. — Bella no para de alardear que es un honor servir para él...

— No sé qué hacer...

— Yo te ayudaré hijo...

— No madre. No te pondré en peligro.

— Tranquilo. Iré a un lugar y cuando regrese te contare todo lo que vamos a hacer para librarnos de todo esto. — dijo y se levantó.

— Madre...

— Nos vemos aquí mismo en la noche. — respondió y salió de la biblioteca.

— ¿A dondé vas Cissy?— preguntó Bellatrix viendo a su hermana acercarse a la salida de la mansión.

— Acompañame.

Narcissa sabía perfectamente lo que Harry Potter y su hijo tenían, después de todo ella lo crió, además de que leyó el diario de Draco, no lo había hecho a propósito pero lo encontró escondido en la biblioteca camuflado de un libro de cocina, ahí se entero de todo lo que Potter le había sumado a la vida de su hijo. Estaba feliz de leer a su hijo tan lleno de vida, que no podía traicionarlo dejando que Voldemort ganara, necesitaba que Harry lo ayudara a escapar del terrible destino que tenía, pero al mismo tiempo necesitaba de alguien en quien confiara, por eso iba a pedirle ayuda a Severus Snape, para que ayudara a su hijo con el plan que habían trazado para Dumbledore.