🌹Dangerously🌹(Jikook)-(COMPLETADA)

50. Esa pesadilla no había terminado.

La sala de espera de urgencias estaba llena de policías, curaron y cosieron los dos cortes de Jungkook y también vendaron sus muñecas. Al señor Jeon le habían sacado la bala incrustada en la rodilla y le mandaron analgésicos y reposo, se quedaría la noche allí en observación.

A los señores Min y su hijo los atendieron más bien de manera psicológica, pues no tenían heridas.

Hoseok y Taehyung estaban sentados junto a Jungkook, también habían sido atendidos y como no tenían nada grave los habían terminado sacando y recomendándoles que se fuesen a casa, pues el resto se tendrían que quedar al menos una noche. Pero ninguno pensaba hacerlo.

El pelinegro sollozaba y se limpiaba la nariz con un pañuelo muy usado, Taehyung le acariciaba la espalda tratando de darle consuelo, pero realmente no tenía ninguna palabra de aliento para decir. Sus seres queridos llevaban bastante tiempo siendo atendidos, unos más graves que otros, Kim Namjoon había llegado con un hilo de vida al hospital, pero no había resistido. El chico mandó un mensaje a Seokjin para comunicarle la trágica noticia, ya que sabía que se habían hecho amigos.

En cuanto a Ginger y Jimin eran los que estaban más graves pero habían sobrevivido. Ambos habían perdido mucha sangre y en ese momento se encontraban sedados, con goteros y siéndoles administrada sangre del banco. Por suerte tenían de su tipo en reservas, aunque los tres chicos de fuera estarían dispuestos a donar la suya si hiciese falta y fuese compatible.

A la chica la habían tenido que meter en quirófano para poder sacarle la bala del hombro, había hecho bastante daño en la unión de los huesos y su recuperación sería lenta y dolorosa, pero ya estaba fuera de peligro.

A Jimin lo atendieron de inmediato y los médicos y enfermeros estaban bastante horrorizados, habían visto muchas enfermedades y heridas a lo largo de sus carreras y vida laboral, habían curado heridas de bala en alguna ocasión, pero nunca habían visto una víctima de tortura.

Tenía múltiples cortes y golpes por todo el cuerpo y rostro, una herida de bala en las costillas, aunque por suerte fue superficial y el muslo casi destrozado junto con los pantalones que tuvieron que cortar del todo y desechar. Toda su ropa terminó en la basura.

En total habían tenido que coserle tres cortes en el rostro, uno en el cuello, la herida de la costilla, dos en el pecho, una bastante grande en la espalda, cinco en sus brazos, la enorme herida del muslo. También tenía dos dedos de la mano derecha rotos y la tibia de la misma pierna a la que le habían arrancado carne. Una vez se recuperase de todo aquello al completo o casi tendrían que hacerle un ingerto de piel en el muslo.

Los tres chicos estaban cansados y doloridos, pero estaban tan preocupados que no querían alejarse ni si quiera para ir a por agua.

Yoongi se acercó a ellos cuando salió del ascensor, pues él y sus padres habían sido atendidos por segunda vez en otra planta. Taehyung se levantó de inmediato y se miraron en silencio, finalmente el más bajo agachó la mirada y dijo en voz baja:

—Lo siento... Siento haberme bloqueado y no haber sido de ayuda.

Taehyung acortó los pocos pasos que los separaban y lo abrazó con fuerza, Yoongi cerró los ojos y aguantando las ganas de llorar se aferró a su espalda.

—Hey, ha sido un horror, no tenías que hacer nada, Yoongi, solo te hubieses puesto en peligro.

El chico no pudo contener las lágrimas, agarró con fuerza la ropa del castaño y escondió su rostro entre su hombro y su pecho. Se sentía un fraude, siempre se las había dado de autosuficiente e inteligente, creía que conseguía todo lo que se proponía. Pensaba que era una persona fuerte, pero ahora sabía que no. Cuando se había visto envuelto en una situación verdaderamente importante se había hecho pequeño, se había bloqueado y lo único que terminó haciendo fue vomitar.

—Fue de gran ayuda que consiguieses enviar el mensaje, Yoongi. Fue arriesgado y aún así lo hiciste, quién sabe lo que hubiese llegado a pasar si no hubieses hecho eso.

Los señores Min se acercaron a paso lento a ellos, esperando que se separasen para poder decirles a lo que habían venido, pero los chicos se abrazaban con los ojos cerrados y no se dieron cuenta de su presencia. El señor Min carraspeó un poco, llamándoles la atención y consiguiendo que lo mirasen.

—Ha sido un día muy duro y no quiero alargar más la cosa, así que trataré de ser breve.—Dijo mirando a su hijo y luego dándole una mirada al chico más alto.—Tal y como imaginábamos, destapar el tinglado de la rusa ha supuesto que salgan a la luz nuestros negocios sumergidos... Las demás personas implicadas se han asegurado de desvincularse lo antes posible de esos asuntos, algunos  de ellos han sido nuestros abogados. A Kwang solo le queda uno disponible y está tratando de hacerlo lo mejor que puede, pero la cosa no pinta bien...

Jungkook y Hoseok también estaban escuchando la conversación, sentados aún en las sillas de plástico de la sala de espera, a poca distancia de los otros cuatro. Min los miró, quedándose un poco más observando al más joven con una expresión de lástima.

—Nos vamos a tener que enfrentar a los cargos que nos corresponden.—Continuó su esposa.—Pero probablemente salgamos mejor parados que Kwang y...

Desvió su vista hacia los chicos cuyo nombre desconocía o había olvidado si los escuchó en algún momento.

—Vosotros también seréis juzgados, de hecho, creo que cuando salgais del hospital no podréis regresar a casa.—Dijo el señor Min, mirando a Taehyung y Hoseok alternativamente.

—Ni si quiera tenemos casa...—Respondió Taehyung metiéndose las manos en los bolsillos del pantalón y apartando su mirada por un momento. Se recompuso de forma rápida cuando notó la fría mano de Yoongi agarrando suavemente su brazo y sintió su mirada sobre él.—Pero no se preocupen, éramos conscientes de que tendríamos que asumir nuestros cargos una vez ésto terminase.

—A pesar de todo estamos muy agradecidos, joven, de no ser por ustedes tal vez no solo tendríamos que lamentar una muerte. No sé de qué manera compensároslo.

Taehyung fue a decir que no era necesario y Yoongi estuvo a punto de pedir a su padre que les pagase el mejor abogado, pero Hoseok se adelantó:

—¿Respetarán el tiempo de recuperación de Ginger y Jimin?

Los señores Min observaron al chico sentado a un asiento de distancia de Jungkook, con una gasa cubriendo su frente, unas ojeras muy marcadas y una mirada tremendamente cansada. La mujer se apartó del lado de su marido y se dirigió a él, agarró su mano de forma maternal al sentarse en el sitio que antes ocupaba Taehyung.

—Vamos a encargarnos de ello, trataremos de hacer lo posible. En cuanto esos dos chicos suban a planta pediré que los pongan en la misma habitación y, que aunque tengáis vigilancia, se os permita quedaros con ellos hasta que les den el alta.

—Muchas gracias.—Respondió el castaño, posando su otra mano sobre la de ella.

Todos estaban en silencio y a Jungkook no paraba de darle vueltas la cabeza, tal vez había pasado lo peor, pero aquello no había terminado.

—¿Qué ha pasado con la rusa?

Aquella pregunta los pilló por sorpresa, después de lo que había pasado a los demás les importaba bastante poco el estado de aquella horrible mujer, pero no era el caso de Jungkook. Le venían recuerdos de Namjoon y le dolía el pecho la idea de que no lo volvería a ver, que tuvo un final tan desafortunado e injusto.

—También se encuentra en cuidados intensivos, está fuera de peligro.—Respondió el señor Min.

Él asintió y se sorprendió a sí mismo suspirando aliviado, porque pensó que deseaba que hubiese muerto, pero después de todo lo que había hecho creía que ese hubiese sido un final demasiado dulce para Ninette.

Definitvamente esa pesadilla aún no había terminado.

-----------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

¡Hola! Ya sí que sí estamos en la recta final, espero que os esté gustando y que todo sea entendible o coherente aunque no tenga demasiado tiempo para escribir y muchas cosas en la cabeza.

¡Hasta el próximo!