Capítulo 21

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Sánchez:

Con el Flavor en mis manos, hago un par de llamadas, la furia me consume, ¿Cómo es que Pedro se llegó a enterar de que Annie vive en un basurero?, ¡¿Cómo mierda llegó a un basurero?! mi secretaria me trae un té, y se sienta junto a mí, en este silencio, junto a ella el aire va perdiendo la densidad tan oscura del momento.

—¿ya le entregaste la carta?...

Le digo al inútil del cartero, siento su nerviosismo, pero me responde que sí, ¿pero ¿cómo?, ya pasaron más de dos días... Annie me da un beso, le acaricio el pelo y la aparto... miro hacia la frontera de la ciudad, Pedro aparecerá en algún momento, y si Annie no está aquí, no sé qué demonios haré... Rodríguez aparece, tímido por la puerta

—¿ya sabes dónde está?

Escucho sus indicaciones con atención, hago un par de llamadas, —un vestido y una cama serán suficientes. —Le digo a mi secretaria — y para los Alonzo, una recamara con una capacidad para detenerlos, por lo menos una semana aquí. —Ella me responde, y dice que en unas horas todo estará listo

La puerta se abre de nuevo, Pedro aparece, con Katy de su mano, la mirada entre esta última y yo se enciende... miro a Pedro con el corazón en mi garganta, el guardia que los dejó pasar me mira desde afuera, y siento ese olor que entra con el aire, ese olor a Katy que gritaba como una loca en mi cama.

—Bienvenidos

Les digo, en seguida pasan los encargados de la presentación, miro el reloj, ya es tarde, en mi celular hay un mensaje "listo", entonces me despido con un "un momento" Y salgo en busca de Annie al maldito basurero.

Si pudiera volarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora