Lovers - 연인 ¦ Soojun ¦

Capítulo XI

— Mira lo que compre para ti, lo hubiese preparado pero no soy tan bueno en la cocina — Yeonjun últimamente estaba compartiendo unos cuantos platos de comida a Soobin, porque se entretenía viendo aquellos platillos deliciosos que tenían una decoración excelente en esas fotos de sus redes sociales; y como no los preparaba, optaba por comprarlos para compartirlos después — Solo se preparar ramen después de todo — vaciló pensando en lo exquisitos que le salían.

Los boyos de carne se veían esponjosos en sus dedos por lo que Yeonjun sostenía los palillos y era el único par que traían así que no le quedaba de otra que comer con su mano. Lo mastico e hizo un gesto de que estaba más que bueno con su boca.

— Una chica me los vendió y creo que también los hizo ella. — mencionó mientras masticaba y tapaba su boca como era su costumbre hasta vaciar su boca del alimento.

Todavía no estaban los otros dos jóvenes, pero no por casualidad, sino sólo por Beomgyu que ese día no llegó a clases y Wooyoung de seguro estaba con sus otros amigos para no molestarlos.

— Hyung, mírame — el mayor levantó la vista por estar fijado en su topper. Soobin con cuidado agarro su mandíbula y con sutileza limpio las comisuras de sus labios con una servilleta, dándole toques con el papel para no remellarlo. — Tenias comida al rededor de tu boca.

— Ahg, me lo hubieras dicho para limpiarme yo mismo. — había tenido que ocultar su vergüenza mostrando molestia, apartó su vista para cubrir sus labios con su mano sosteniendo la servilleta. Le gustó ese gesto agradable del menor y tal vez si llegó a ruborizarse pero no era tan tonto como para ser típico personaje que amaban las chicas. Su confianza con Soobin podría ser mejorable, después de todo se sentía como solo el comienzo de su relación y no quería que fuese interrumpida a la fuerza para tener algo más profundo en un corto tiempo.

La comida estaba buena para la ocasión, pero se suponía que sería para los cuatro y las obvias razones, dejaban mucho en que contar. — ¿Cómo podría? Si te ves tan distraído comiendo. — estaba siendo tierno con su mayor sin importarle que sea algo irrespetuoso por el trato que debía merecerse en las costumbres de su país.

— Eso no es interesante. — renegó admirando la sonrisa con hoyuelos de su novio — Por cierto ¿y tu amigo Beomgyu? Siento que hace falta que se queje de lo melosos que nos ponemos.

— A mi también me sorprende que haya faltado. Creo que tenía asuntos amorosos que responder. — enmarcó ese adjetivo con un tono diferente de voz aunque poca atención le daría después de la llamada que tuvieron. Y hablando de eso, suponiendo que tuvieron algo, más que molestia fue embarazoso tener que escuchar a su amigo en una situación un tanto personal, por otro lado, tuvo que verlo después de su escapada en donde le explicaron todo y los detalles que lo hicieron sentir como un completo estúpido por su mal entendido que dejó llevar muy lejos a esos pensamientos cotidianos para un adolescente. Eso no lo convertía en pervertido, pero si soportó las risas de su amigo mientras el se ponía rojo hasta las orejas cuando le preguntó sobre lo que hicieron y obtuvo una respuesta distinta que era más fácil y menos rara de comprender.

Yeonjun levantó una ceja por lo que ya lo entendía por las tantas historias que le lanzaba Beomgyu y su amorío — ¿Acaso estas envidiando que él los tenga y tu no? — Bien, esa pregunta se volvió un tanto rara por la importancia en la que sonaba o porque les faltaba un tiempo más para tener lo de esos dos chicos.

— No es envidia. Eso... solo, no es de mi agrado. —

— ¿Y conmigo? ¿Te es desagradable?

— No es lo que quise decir. — se estaba reiterando en dos ocasiones porque no era posible decir lo que quería ni lo que no quería, en una oración corta — me refiero a que Beomgyu anoche me llamó y fue raro escucharlo en eso. — estaba omitiendo las palabras pero de tal forma que le era fácil de entender.