Lovers - 연인 ¦ Soojun ¦

Capítulo XV

Pasaron un minuto de rotundo silencio, en el cual la adrenalina en ellos estaba dando paso a una idea descolocada. Yeonjun se puso de pie secando por completo sus ojos con la brisa de la noche, pero su repentino mareo lo hizo cogerse de su frente regresando a su estado normal para no dar un paso en falso. Fue tomado de su muñeca para que no perdiera el equilibrio y era Soobin quien lo veía preocupado.

- Tienes que descansar.

El mayor solo quería decir que si, pero sus cinco sentidos no estaban despiertos y su cerebro en señal de eso, negó. El quería gritarles a los padres de Soobin sobre su relación y justo en su estado para no ser amenazado por la vergüenza, sin embargo aún lo detenía, porque sería más riesgoso presentarse de esa forma y que piensen que simplemente es un loco.

Aún seguía ebrio y eso empeoraba la situación. Quiso entrar a la casa, pero Soobin era el encargado en abrir con sus llaves, así que se detuvo y lo espero hasta que abriera la puerta, pero cuando lo hizo, se tomó la sorpresa de que sus padres no estaban, ni siquiera su madre que lo esperaba cuando llegaba a altas horas de la noche.

- Yeonjun hyung, mis padres no están. Entra con cuidado.

Lo ayudó para que no tropezara y para quitar sus zapatos en el cuadrado alfombrado para intercambiar sus zapatillas.

Ya adentro el mayor aún no podía caminar tan recto por su visión dando vueltas. Soobin lo llevó agarrando su cintura y haciendo que el brazo de Yeonjun rodee su cuello; así no correría el riesgo de rodar por las escaleras.

La luz de la habitación de Huening era la que seguía prendida y era notoria por el pequeño espacio que dejaba debajo de la puerta aún iluminando el piso. Soobin llamó a la puerta y la abrió sin que lo invitaran a pasar. Su hermano estaba dormido sobre su escritorio o más bien, sobre sus libros abiertos con la materia incompleta.

- Hueningie. - se lamentó Yeonjun sin hacer tanto ruido por despertarlo.

Su hermano mayor ingresó a la habitación con sigilo y sacó una manta de un baúl aledaño a la cama. Tenía entendido que si despertaba a su hermano, éste se seguiría estresando con las tareas y las seguiría haciendo si era posible hasta la mañana siguiente y eso era lo que no quería que haga, pero tampoco era su intención dejarlo de esa forma en la mesa para que le cause un dolor en su espalda al despertar.

Lo abrazo con una delicadeza increíble para que el sueño siga en pie en el chico y gracias a la silla con ruedas, pudo apartarlo del escrito con éxito y lo agarro ágilmente en sus brazos solo hasta dejarlo sobre el colchón. Como si no hubiese sentido nada, seguía caído en un sueño profundo y pesado. Lo abrigo con la manta para que durmiera más profundamente y lo dejó solo en su cama.

Por un momento se acercó al celular de Kai que seguía conectado a su cargador en el escritorio. Al ser cercanos, tenían la posibilidad de desbloquear sus celulares con sus huellas digitales añadidas hace tiempo y con rapidez pudo ver que su madre le habia mandado un mensaje, solo a su hermano, porque al parecer si habían regresado del trabajo, solo que después de alistarse salieron de nuevo enseguida.

Cielo, dile a tu hermano que llegaremos en la madrugada y que no se preocupe por nosotros. Pueden cenar el refrigerio que hice hace unos minutos. Lo dejé en el horno. Y no salgas de casa si Soobin aún no llega.

No tenía idea de a donde habrán ido, pero se podía imaginar que debió ser una de sus fiestas empresariales de su trabajo. Las reuniones que solo tenían tiempo en la noche, porque respetaban el horario de trabajo habitual mañanero.

Soobin suspiró aliviado, por esta vez estaba salvado por la hora.

Dejó como estaba el celular y salió de la habitación solo para ver a Yeonjun dormido en el marco de la puerta. Este día ha sido largo para Soobin y no sabe como explicárselo sobre todas las cosas que le sucedieron ese día. Estaba cansado.