Narra Vanessa Sano
Ya pasó una semana. El funeral de Baji fue hace tres días. Ya me quitaron el yeso ayer.
Estoy en una cafetería, mirando el cielo. Se supone, que vendría con Chifuyu, pero él dijo que no podía, ya que Peke J enfermó y lo tenía que llevar al veterinario.
Tomo un sorbo de mi café. Me acuerdo que siempre veníamos a aquí con Baji. Ambos comíamos un pastel con forma de gato. Era prácticamente una tradición comer de ese pastel aquí. Río, mientras que un par de lágrimas caen de mis ojos. Toco mi collar. Lo extraño tanto...
La campanita de la puerta de la cafetería suena. Unos pasos se dirigen hacía aquí y Ciel se sienta en frente de mí.
-Me dijeron que estarías aquí- Dice Ciel y se inclina a limpiar mis lágrimas-. No llores, Vanny. Las princesas...
-No lloran, lo sé. Me lo decía mamá todo el tiempo- Digo y apoyo mi mano sobre la de Ciel. Una mesera viene a tomar el pedido del peliazul. Después de ordenar, la mesera se va.
-Vanny... Lo extrañas, ¿verdad?- Me pregunta.
-La verdad sí... Es duro estar sin él, hablándome todo el tiempo de idioteces- Río.
Los dos seguimos hablando. Me siento... rara. Él ya terminó su café, al igual que yo. Ciel paga lo de ambos y salimos del lugar. Ambos salimos de la mano. Me siento observada. Los dos llegamos a una especie de callejón, en dónde me abraza y esconde su cabeza en mi cuello.
-Me encanta tu olor... Es tan dulce- Dice Ciel.
-¿Que cosas dices?- Río. Siento algo húmedo en mi cuello. ¿Me está besando el cuello?-. Ciel, ¿qué...?
-Shh...- Él apoya uno de sus dedos en mis labios. Ciel vuelve a lo suyo, dejando marcas por todo mi cuello.
-¿Te recuerdo que es lo que eres?
-En esta vida, nada. En la anterior, éramos hermanos. Así que puedo hacerte lo que quiera, sin que nadie nos diga nada.
-Estas loco, Ciel...- Él separa su cara de mi cuello y me mira.
-La única loca eres tú. Así que, cállate y déjame continuar- Ciel vuelve a lo suyo.
Narrador omnisciente.
Takemichi, ya en el futuro, entra al edificio. Fuera de una habitación, se escucha una discusión.
Por otro lado, la pandilla llamada Sakura, se dirigía a aquél edificio. Dentro de la limusina, Ciel discutía con Sebastián.
-No te metas con mi mujer, Sebastián- Exclama Ciel, señalando al de pelo negro con un dedo acusador.
-No me metí con ella, amo. Usted sabe perfectamente que yo nunca lo haría- Dice el hombre, con total calma.
-Ya no se peleen por mí- Dice Vanessa, mirando a ambos. Ella acomoda su cabellera, de color marrón, que le llega un poco mas abajo de los hombros.
-Ay, dios...- Dice Claude, llevando una mano a su frente.
Cuando llegan a su destino, Vanessa baja. Todos hacen una reverencia. Ciel agarra a su esposa de la mano, mientras que Sebastian y Claude se mantienen detrás de la pareja. El ascensor abre, dejando ver a tres hombres de traje y una mujer, con un vestido muy elegante, de color negro, que le llega a las rodillas.
Apenas entran a la habitación, todos hacen una reverencia, a excepción de Takemichi, que luego se da cuenta e imita a los demás.
-Ya déjense de ridiculeces, nos conocemos hace años- Dice Vanessa, mirando a todos. Los demás dejan la reverencia.
-Se ve muy bella esta tarde, señorita Phantomhive- Dice Koko, mirando a la mujer.
-Muchas gracias, Kokonoi- Responde la chica, sentandose a un lado de Ciel. Él apoya su mano en la pierna de la mujer.
-¡Vanessa! No sabés cuánto te extrañé. Hace tiempo no te veía- Habla Hanma, levantándose y abriendo los brazos como para abrazar a la mujer. Claude, Sebastián y Ciel apuntan al alto con armas.
-Para tí, ella es señorita Phantomhive, idiota- Exclama Ciel. La mujer levanta una mano y los tres guardan sus armas.
-Lamento eso, Shuji. Son unos exage...- La mujer no termina de hablar, cuando se vuelven a abrir las puertas.
Kisaki entra y todos, a excepción de Vanessa y Ciel, hacen una reverencia.
-Buenas tardes a todos. Vanessa, Chifuyu, Takemichi, ¿podrían acompañarme?
Vanessa se levanta, junto con Chifuyu y Takemichi. Ya en la oficina del rubio, le ofrece un whisky a cada uno, que la joven rechaza, pero Chifuyu y Takemichi aceptan.
-¿No quieres un vaso de agua?- Ofrece Kisaki.
-No, gracias.
-¿Segura?
-Si, Kisaki- Habla con un tono frío- ¿Que mierda quieres?
-Queria pedirles perdón. A los tres. Lamento haber hecho eso- Dice el rubio y hace una reverencia- La muerte de Baji es mi culpa. Todo eso era planeado por mi.
-¿Qu...?- Chifuyu no termina de formular la pregunta, cuando se desmaya, al igual que Takemichi.
-¿Que mierda...?- La joven se aleja del hombre, pero él saca un arma y dispara a la mujer, la cuál muere en el suelo.
Narra Vanessa Sano.
-Vanessa... Despierta- Escucho como alguien me llama. Abro mis ojos y me encuentro a Ciel, con el torso desnudo. No sé como ni cuando, pero estoy en la habitación del peliazul- Buen día, Vanny.
-¿Como que buen día?- Miro a la ventana. Recién está amaneciendo- ¿Es broma? Recién está amaneciendo, Ciel. Déjame dormir.
Me doy media vuelta, cerrando los ojos, para volver a dormir. Siento una risa de parte de él, pero deja que me duerma y me abraza.
-Ahora sí. ¡Arriba! Son las ocho de la mañana- Ciel vuelve a despertarme.
-Sigue siendo temprano.
-No para mí, así que ¡Arriba!
-Nop- Digo y me cubro completamente con las sábanas. Él se cubre completamente, ambos estamos debajo de las sábanas. Pasa un poco de luz por la tela de las sábanas, en dónde se puede ver a Ciel en pantalón de dormir y yo en camisón.
-Vamos... Si te levantas ahora, le pido a Sebastián que haga tu postre favorito.
-¿El de frutos rojos?- Pregunto y él asiente-. Soy alérgica a la frambuesa.
-Sin frambuesa entonces- Lo pienso.
-Esta bien.
Me destapo y me levanto de la cama. Bajo a la cocina en camisón, en dónde no hay nadie.
-¿Señorita Vanessa? ¿Que hace aquí? ¿Y que es eso en su cuello?
( ˶ ❛ ꁞ ❛ ˶ )
Buenaaas
Como andan?
Yo espero que bien.
Lo único que quiero decir, es que voy a estar subiendo el prólogo de el fanfic que estoy haciendo en éstos días.
Así que... Eso xd
Buen fin de semana! 😋
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˜"*°•.˜"*°• My lady •°*"˜.•°*"˜ [Black Butler & Tokyo Revengers]
FanfictionLa condesa Vanessa Phantomhive... Es sumamente preciosa. La condesa mas hermosa de Europa, según muchos. Ella es tan... Buena. Mucho para ser real. Se diría que salió de un cuento de hadas. Para muchos hombres, su mujer deseada. Para muchas mujeres...