Elaine
Reviso mi teléfono conectándolo a un nuevo par de audífonos grises. Escucho "Back in my arms – Carlie Hanson", en lo que avanzo a la orilla de la playa donde uno de los empleados me pone la identificación y se retira dejándome con la larga fila de clientes.
—Siguiente —digo tomando los tickets.
Un hombre y su esposa se suben a las próximas motos, un grupo de cuatro amigas va al nuevo turno. Aguardamos por las demás motos, hay diez que se acercan en los carritos, son depositadas en el agua y sigo recolectando tickets y asignando lugares.
Coralina se acerca por un lado con una canasta llena de macetas de plantas, sonríe alzándolo y va acomodando todo en las mesas frente a la piscina. Cada una hace lo suyo, pero después me asignan el área de flotadores y mi amiga se acerca a ayudarme con la recolección de tickets.
Giro a enumerar los tickets, debería haber del mil setecientos al mil ochocientos, solo cien, pero hay noventa y nueve, uno perdido. Abro los ojos de inmediato tirándome a la arena para empezar a buscar.
"Love on me – Galantis" me chilla al oído mientras voy doliéndome las rodillas en la arena. Coralina sigue atendiendo, hace señas para que me pare, pero veo el ticket volándose. Me levanto y empiezo a correr para alcanzarlo, se arrastra en la arena mojada y un grito de pánico me abarca,
Corro más rápido sin darme cuenta de que choco contra los clientes, voy chillando para que lo agarren y cuando estoy a punto de llegar, resbalo, mi dedo se choca en la arena mojada y me vuelco contra un lado, pero el ticket cae sobre mí.
Genial.
Lo agarro en un puño y me pongo a quitar la arena para volver con mi amiga quien está terminando de acomodar los últimos tickets en la caja de madera. Hago una mueca quitándome arena de debajo de las nalgas, se mete mucho.
De nuevo el ticket se me cae y me agacho de inmediato, se mete bajo la mesa y me arrastro un poco estirando la mano para Tomarlo. vamos, vamos, es solo un trozo de papel de muchos euros.
—Ferry —la voz de Coralina hace que mi cabeza choque en la mesa y un gritito abandone mi garganta, mi amiga me da una patada para que me calle —, ¿qu-qué haces aquí?
—Queríamos invitarlas al acuario.
"Invitarlas", con "s", de "muchos", de dos personas, quizás más.
—¿Ahora? —pregunta Coralina, supongo que él asiente —. Ahora estamos trabajando.
—Podría ser otro día —una voz familiar hace que levante la cabeza y choque de nuevo.
Aguanto el gritito de dolor, Coralina me hace una mueca para que me calle y exhalo sentándome en la arena que se me mete a los shorts llenándome las nalgas de suciedad.
Asomo la cabeza por una esquina mirando a Ball parado al lado de Ferry, es mucho más alto que su amigo y por algún motivo luce diferente. No lo he visto en mucho tiempo, a Ferry si, a veces pasa por aquí a saludar a Cora.
Trae shorts blancos de playa, una camiseta azul, Ball, digo, Ball trae... Aparto la mirada cuando mis audífonos dejan de recibir señal y escucho música en todos lados, no, no, no, "Only Girl (In the world) – Rihanna" chilla en los parlantes.
La gente se empieza a ver divertida por el cambio de música, Coralina enrojece tanto como yo, no distingo nada. Qué vergüenza.
Mi amiga carraspea retomando la conversación e intento desactivar la música, pero el volumen se alza más, callándola. Chillo y de pronto la pantalla se congela ¿Por qué se congela? ¡no! ¡No debería congelarse! ¡el móvil es nuevo y solo tengo canciones!
ESTÁS LEYENDO
THE WHALE BOY
Ficção AdolescenteElaine De Ferreiro, la prometedora hija del mejor diseñador de Europa, se ha vuelto una burla para todo ciudadano, incluyéndose ella misma, incapaz de ir al océano y dejar esa fosa donde el alcohol, las fiestas y los recuerdos la llenan del mismo ar...