\\-Eres nuestro deber-\\ ✓Bonten✓

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- Este dibujo que tengo ahora mismo en mis manos será entregado a mí amada reyna - Luz corrió la silla para así poder hacer una referencia ante mí mientras me entregaba su dibujo, el cual agarré.

- Muchas gracias por su dibujo mí querida princesa - Las dos reímos, nos parecía graciosa en la forma en la cual nos tratábamos, y muy tierno a la ves, pero ella solo es mí amiga, solo nos tratamos así porque nos queremos o no?.

- ¡Quiero ver tu dibujo! - Habló mientras se volvía a sentar en su asiento.

- Solo falta unos detalles - Hablé con mis vista en el dibujo, el cual estaba siendo pintado por mí. - y ya! - Levanté el dibujo con mis manos, para después entregárselo a Luz. - Está obra de arte será entregado a la más hermosa princesa de este mundo, ¡Luz! - Le entregué mí dibujo, a ella se le iluminaron los ojos al verlo.

- ¡Esta hermoso, igual que tu, me reyna! - Sonreí ante el halago que me acababa de hacer.

El timbre para entrar a clases de nuevo sonó, y mis demás compañeros empezaron a entrar al salón, al igual que la profesora, pues en esta escuela solo tienes una profesora quien te da las 4 materias, y la materia que teníamos ahora era historia, la cual no me agradaba mucho.

Gracias a dios, las horas pasaron rápido, una hora más y ya nos podíamos ir a casa, eso me ponía bastante contenta, ya que podría ver a papá y mis tíos, y no solo eso también les podría contar todo lo que paso e hice hoy!.

- t/n estás prestando atención? - La profesora me hizo salir de mis pensamientos.

- amm s- - Lo que hiba a desir fue interrumpido por un estornudo que salió de mí, la profesora fue hacía mí y me entregó una servilleta, la cual agarré casi al instante. - Gracias - Le sonreí una vez que me limpié mí nariz, la profe hiba a desir algo más, pero fue interrumpida por el timbre, el cual indicaba que ya era hora de irnos.

- Ya pueden irse - Los demás, Luz y yo guardamos nuestras cosas y nos retiramos.

Junto a Luz fuimos afuera, y nos sentamos en la escaleras del colegio, esperando a que nuestros padres vinieran a recogernos.

Una limusina paro en frente de la entrada del colegio, indicándome que papá y mis tíos vinieron a buscarme. Luz me miró un poco confundida, ya que me estaba levantando para irme, así que decidí hablar.

– Algún día te contaré todo – Sonreí mientras soltaba unas cuantas risas. – Ahora si, hasta luego mí princ- – Y otra vez fui interrumpida por un estornudo, al parecer me estaba empezando a resfriar.

– Jaja, hasta luego mí reyna! – Me saludó.