Inglaterra.
Su día está transcurriendo de manera normal, de hecho Charlotte está contenta, es la primera vez en algo de tiempo que tendrá una tarde completamente a solas con Harry y quiere aprovecharla al máximo.
Y está tan enfocada en aprovechar todo el tiempo que están sobre el sofá besandose, sus lenguas enredadas y sus manos en todos los lugares que puede tocar. Gime ligeramente cuando las fuertes manos del ojiverde toman sus caderas buscando más cercanía provocando que sus pechos se aplasten contra el pecho de su compañero, y realmente está concentrada en disfrutar su agradable sesión de besos hasta que el molesto ruido de su teléfono interrumpe y lo primero que hace es soltar un quejido sobre los labios del rizado y haciendo un leve puchero.
-Dame solo un segundo, ¿De acuerdo?- Deja un último beso en los labios del ojiverde hasta acercarse a su teléfono, se sorprende ligeramente cuando ve el nombre de la hermana de Harry en la pantalla, a pesar de que siempre a tenido una buena relación con la familia de Harry pero no suelen llamarla a ella a menudo, normalmente habla con Anne y Gemma cuando llaman a Harry, pero decide no darle mucha importancia y simplemente responde la llamada.
-¿Hola?
-Hola, Gemma.
-Charlie, ¿Harry tiene su teléfono?- A pesar del apodo amoroso y de la aparente tranquilidad en su voz es casi como si pudiera sentir que hay algo mal.
-Creo que su teléfono está en la habitación, pero él está a mi lado, puedo darle el mío.
-Gracias- Eso es lo último que escucha antes de tomar su teléfono y dárselo a Harry el lo analiza un segundo hasta que ve el nombre de su hermana en la pantalla, pone el teléfono aún lado de su oreja y saluda a su hermana como lo haría habitualmente, y está preguntándole cómo está hasta que de repente él se queda callado. Pasan un par de minutos en los que guarda silencio y él solo escucha atentamente lo que su hermana tiene para decirle.
E inmediatamente Charlotte sabe que son malas noticias, lo sabe porque los ojos de Harry están ligeramente más brillantes de lo habitual y con su mano libre saca uno de los anillos que hay en sus dedos y comienza a juguetear con el, eso es algo que hace solo cuando está nervioso o trata de no llorar, normalmente lo hace cuando discute con ella, así que lo sabe, sabe que algo malo a pasado.
Preocupada se acerca a él y pone sus mano sobre el muslo del rizado tratando de consolarlo y tranquilizarlo ,aunque en realidad no sabe porque solo quiere aliviar el aparente estrés que parece tener, hasta que la llamada es finalizada.
-Cariño, ¿Qué sucede?- Pregunta con tono amoroso mientras su mano sigue sobre la pierna de Harry. Pero él guarda silencio su mente está sumida en lo que acaban de decirle demasiado conmocionado como para darle una respuesta.
-No quiero hablar de eso ahora- Solamente escucha eso antes de ver cómo él se levanta y camina hasta su habitación, si es algo malo no quiere hostigarlo con preguntas y hacerlo sentir aún peor pero el hecho de simplemente haya decidido irse en lugar de hablarlo solo hace que su preocupación crezca ¿Qué es lo suficientemente grave como para que él no pueda contarle?. Toma su teléfono y devuelta llama a Gemma para preguntarle qué es lo que a ocurrido.
-Hola, Gemma. ¿Qué a pasado?
-¿Harry no te lo a dicho?- Está vez puede distinguir claramente como su voz es la de alguien que estaba llorando.
-No, solo se levantó y se fue. ¿Pasó algo malo?
-Robin murió, Charlie, fue anoche en el hospital, mamá está destrozada y no sé que hacer, solo iba darles los datos de el día para el funeral, esperaba que pudiéramos quedarnos con mamá unos días, no quiero que se quede sola.