Ashton
Papá había conseguido que dos de mis primos, abogados con algo de menos experiencia que Marco, fueran también los representantes de Alaska por un módico precio, considerando que eran abogados.
Habían decidido no tomar al fiscal, no porque fuera mal abogado, sino porque Marco era mejor y con ayuda, podía darle una buena patada en el trasero a los abogados de Williams.
Los detectives investigando el caso estaban habían conseguido más mujeres que pudieran ser testigos y ahora estaban yendo por personas que supieran de las andanzas de Williams.
Lucía estaba siendo muy difícil y había sido acusada como cómplice para intentar que aceptara algún trato a cambio de su testimonio, algo que, por el momento, no estaba funcionado.
Ese día era un día especial, no sólo porque los resultados de los exámenes de Gohan ya habían llegado a mi madre, sino que, también, a las doce se revelarían los ganadores de la lotería y yo por fin le demostraría a Alie que su experimento era igual al excremento de Twinkle o peor, de mis peces.
Habíamos ido a la casa de mis papás, la cual estaba casi vacía, pues Pierce ya no vivía ahí y los demás estaban trabajando.
Papá estaba con mi madre en la oficina. Él aun usaba un bastón, pero ya pronto podría dejarlo.
Los tres entramos, los saludamos con un apretón de manos y nos sentamos en el sofá.
—Marco está con la policía ahora y me dijo que les dijera que la primera audiencia sería a fin de mes.
—Perfecto —dijo Alie—. Gracias, señor.
—Ahora, Gohan.
Mi madre estaba apoyada en el escritorio, ya que mi papá usaba la silla y así evitaba forzar su pierna.
—Puede que tus bajas de presión sean sólo por una reacción de tu cerebro ante la presión y terror, pero encontré unas anomalías en tus exámenes —informó.
Eso me asustó.
—¿Está bien? ¿Es mortal? ¿Tiene cura?
—Ashton...
—Es una enfermedad de transmisión sexual —supuse y miré a Gohan—. ¡Sabía que tu promiscuidad terminaría mal, aunque usaras condón siempre!
—Ashton...
—¿Qué es? ¿Sífilis? ¡Eso terminará destruyendo su cerebro!
—No es eso, Ashton.
Solté un suspiro de alivio, pero inmediatamente volví a aterrarme.
—¡Es Alzheimer!
—Tiene veinticuatro, no puede presentar síntomas de Alzheimer aún —recordó mi madre—. Ahora cierra la boca y óyeme.
—Por fin —susurró Gohan cuando guarde silencio.
—Tienes un soplo cardíaco —comunicó.
Yo sentí mi alma volar e irse al cielo y Gohan pareció asustarse por fin.
—¿Es mortal?
—No, tranquilo, son muy comunes —respondió mi madre—. No es grave, ni te traerá problemas, ni debe ser tratado. No se cura, pero al no causar ningún impedimento de vivir una vida normal, da igual.
Ambos nos sentimos muy aliviadas.
—Y también está un poco baja tu vitamina B12 y D —agregó—. Te daré suplementos para ambas y veremos como evoluciona todo.
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Nosotros contra Los Ángeles [LA #2]
DiversosLuego de que Alaska pase por una desafortunada situación con el poderoso productor de cine Mike Williams, se verá enfrentada a distintos problemas laborales y teme que su carrera de actuación se hunda para siempre. Nuevamente, Gohan y Ashton están d...