cherry and Blueberry

Dormir

Louis decidió no tocar el tema de su madre, si no la menciona mucho, es por algo y el no quería incomodar a su nuevo amigo. Ahora Harry se encontraba sentado sobre su cama, mostrándole los miles de tonos de esmaltes que tiene y confesando que le gusta mucho pintar sus uñas pero su padre no está de acuerdo.

— ¿Por qué?— pregunto, tomo un esmalte verdoso esperando la respuesta de Harry.

— No lo se— Murmuro. Louis lo miro con una mueca antes de entregarle el esmalte.

— el verde te quedaría bien— exclamó ganando una leve sonrisa con oyuelos.

— verde— repitió observando el esmalte verde menta que Louis le mostró.

— papá dice que soy chico, no debo pintar mis uñas— confesó.

— mi padre seguramente piensa lo mismo—  buffo con molestia. Odia a su padrastro, es de lo peor y con el es una mierda.

— Aún que no creo que debas ser chica para usar esmaltes. En lo chicos también se ve lindo— Hablo mientras miraba los miles de tonos de esmaltes.

— en chicos lindos— Murmuro en un suspiro melancólico.

— como tu—

El rostro de Harry había cambiado de melancólico a avergonzado, sus mejillas ardieron y quería esconderse de Louis para que no lo mirase.

— Sabes que no estoy mientiendo — hablo antes de lavantar la vista y mirar a un Harry totalmente sonrojado.

— ¿Que me hace lindo?— necesitaba la respuesta, Louis todo el tiempo le está diciendo lo lindo que es, Harry no se concidera lindo mucho menos atractivo y no hace nada para serlo.

— bueno, yo cr...—

—¡Harry e llegado!— la voz gruesa y gastada hizo a Harry temblar, así que con rapidez tapo la boca de Louis con sus manos.

— ¡Ya bajo!— grito obteniendo una mirada curiosa por parte de Louis. Poco a poco quitó las manos de el rostro de Louis, haciendo que este comenzará a preguntar.

— es papá— Murmuro. Louis ladio la cabeza, no se supone que Harry tenga miedo, debe de estar feliz de que llegó su padre.

— ¿Está todo bien?— pregunto. Harry negó colocandose de pie.

— Quédate aqui. Por favor— pidió antes de abrir la puerta y salir, Louis miro la salida con con su ceño fruncido y mirada curiosa.

No escuchaba mucho ruido, solo murmuros los cuales eran bajos y no lograba saber que era lo que decían. Miro la hora, comenzaba hacer tarde y tendría que ir a casa, por suerte en su mochila guardo su más preciado tesoro su teléfono, este era del tamaño de un ladrillo y el audio no era tan bueno, pero era la envidia de todos sus amigos, tener la mejor tecnología dentro de tu mochila es de lo más genial.

— Hola mama— Murmuro no quería hacer tanto ruido.

— Louis Wiliam Tomlinson ¿¿dónde estas??— su madre sonaba molesta.

— estoy en casa de un amigo— Murmuro.

— ¿Que amigo? Llame a todos los que conozco— su madre estaba alterada y se sentía culpable por eso.

— perdón mamá, estoy con Harry— escucho un suspiro de alivio tras la línea.

— ¿El niño de la panadería?—

— si, debí avisarte. Lo siento— se sentía mal, mamá pocas veces se molesta con el.

— Debiste hacerlo. Que no vuelva a ocurrir— definitivamente no volvera a ocurrir.