Se mi novia Parte 1

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Como lo predije el vuelo se retrasó así que llegamos casi a las 5 am del día siguiente, las azafatas se encontraban ayudando a los pasajeros mientras Seokjin y yo estábamos en la cabina esperando nuestro turno.

-Ya pueden salir- dijo SeoJin asomando su rostro por la puerta.

-Excelente quiero dormir- dijo Jin tomando sus cosas.

-¿Me puedes llevar Oppa?- dijo esta a su hermano.

-Que te lleve Nam, me dijo que tiene que hablar algo con su madre-, mintió, no me molestó que lo hiciera, al contrario me convenía.

-Claro, vamos- dije, aprovecharía el camino para pedirle una cita.

...
Esta me siguió al estacionamiento y tomé su maleta para subirla al coche.

-Te ves muy bonita sonrojada-, dije para bromear un poco mientras me adentraba al coche, está ya estaba en su lugar y con el cinturón puesto. Solo desvió la mirada a la ventanilla dejándome ver una tímida sonrisa.

Creo que luego del beso tengo aún más confianza en que lograré algo con ella, es decir fue como una confirmación de que yo también le gustó, así que mi nerviosismo cesó un poco.

-¿Que harás mañana?- pregunté

-Llevaré a SeoMin con su papá- dijo

-¿Y en la noche?- dije luego de algunos minutos.

-Estar en casa con SeoMin- dijo y dirigió su mirada a mi.

-¿Te gustaría salir con migo?, no se, ir a cenar, ver una película o algo por el estilo.

Esta solo se dedicaba a mirarme y habría la boca para responder pero luego la cerraba, hasta que al fin se decidió a hablar cuando aparcamos frente al edificio.

-¿Si sabes que tengo un hijo? - asentí -¿que soy divorciada?- repetí mi acción -No lo veo conveniente- respondió luego de algunos minutos, pero claramente sabía que era por los tontos prejuicios.

-¿No te gusto?- fui directo, la vi dudar y luego tomó una bocanada de aire antes de responder.

-No es eso, sinó que..

-Ahí está mi respuesta, piensa en que te gustaría hacer, podemos salir los tres si deseas, ¿te gustaría?- dije y asintió -Maravilloso, a donde te gustaría ir?

-Hay una feria en la cuidad, pero quizás sea muy ruidoso, además de que habrán muchas personas- dijo apenada.

-¿Bromeas?, me encantan las ferias, y se que nos divertiremos mucho, luego podemos ir a cenar.- dije y me regaló una sonrisa para luego bajarse del coche, siendo seguida por mí.

Entre  los trámites y procedimientos que debíamos hacer en el aeropuerto, además del tiempo de cambiarnos de ropa y el transcurso a su casa eran casi las 7 am, así que ya habían algunas personas por los alrededores de su edificio, baje su maleta y la acompañe arriba.

Me picaban las manos por tomarla en mis brazos y besarla nuevamente, deseaba tanto un beso suyo como respirar, pero no me permitiría dejarme llevar por mis impulsos, no cuando podría echar todo a perder con ella.

Pero me era tan difícil no verla reflejada en las a redes internas del ascensor, su delicado rostro, sus hermosas facciones, sus maravillosos ojos y esos dulces y regordetes labios que tanto deseaba volver a probar.

Y como era de esperarse fui pillado por ella observándola, más no desvíe mi mirada, era como un iman que me obligaba a mantener la vista puesta en ella.

-¿Te puedo besar?- dije aún mirándonos a través del reflejo del ascensor.

-Por favor.-, dijo, más no me permitió reaccionar cuando ya se encontraba frente a mi, se acercó a mi rostro con rapidez y beso mis labios.

Un beso lento e intenso, sus manos se encontraban alrededor de mi cuello y las mías en su cintura, mi lengua y la suya se encontraban en el interior de nuestras bocas creando deliciosos roces, sus manos me acercaban más a ella volviéndolo así aún más intenso, perdí la cordura en ese momento.

Mi cuerpo se encontraba aprisionando el suyo contra ellas paredes del ascensor, este ardía, la deseaba tanto.

El sonido del ascensor abriéndose nos hizo separar nuestras bocas, más no nuestros cuerpos. Sus ojos miraban los míos con anhelo.

-Me gustas mucho SeoJin, quiero que seas consiente de eso, quiero que sepas que estoy dispuesto a todo contigo, así que por favor no dudes, dame la oportunidad de hacerte feliz.- dije sobre sus labios. Está asintió y me dediqué a sus labios nuevamente, intenso y desesperado fue nuestro siguiente beso, los chasquidos y nuestras ajitadas respiraciones eran lo único que se escuchaba.

Las puertas del ascensor se abrieron y cerraron por varias ocasiones, pero no nos movíamos de donde estábamos, cuando solté sus labios estos se encontraban rojos e hinchados, sus manos estaban aprisionando el cuello de camisa y las mías estaban en su trasero.

-Lo siento-, dije al notarlo, retirado las inmediatamente.

-Si quieren puedo tomar las escaleras- escuché una voz detrás de mí y cuando giré mi rostro ahí estaba el peli negro sonriendo frente a las puertas abiertas del ascensor.

-Deberías-, me limite a decir, y me quede viendo como se marchaba frente a mis ojos.

-¡Que vergüenza!- dijo SeoJin para luego tapar su rostro apenada.

Eso me genero ternura, así que la tomé y la envolví en un abrazo, al cabo de unos segundos colocó sus brazos a mi alrededor quedando así ambos encerrados nuevamente.





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