En el momento que nuestros ojos cruzaron vistas me di cuenta que había predecido mis acciones.
Y segundos después balanceo su cola para golpear al presentador y a quien lo había traido a rastras.
Ambos salieron volando por la fuerza ejercida hacia atrás.
La criatura se levanta del suelo y el público se encontraba en un estado de shock al ver que todo cambió en cuestión de un segundo.
Me paré en el bordillo del palco y empecé a sacar la katana.
El sonido vibrante llamó la atención de él que estaba tratando de zafarse.
¡Que suerte todavía tengo tiempo para avisar!.
Me giré hacia el público.
Kyouko:¿Qué hacen?.¡¡¡Huyan!!!.--Grité grandemente.--
Los nobles al escuchar mi grito reaccionaron y empezaron a correr en vandada.
Noble 1:¡Huye! ¡Esa cosa está suelta!.--Empezó a correr.--
Noble 2:¿Cómo puede ocurrir esto? ¿No dijeron que lo tenían controlado?.--Dijo desesperado.--
Noble 3:¡Dijeron confundido no controlado así que huye!.--Corría con todas sus fuerzas.--
A pesar del alboroto y el desorden empezaron a salir rápidamente.
Miré que el palco del Primer Ministro estaba vacío.
¡Cobarde! Debes haber huido antes de los esperado.
Pero está bien.
Como no había nadie podría usar todas mis habilidades.
En ese momento siento que algo se rompe.
¡Crack!.
Mi ojos regresaron para ver a ese extraño demihumano pero lo único que pude ver fueron los grilletes que habían sido rotos completamente. Ahora, yacían en el suelo.
¿No me digas qué...?.
Extrañamente siento el sonido de una respiración a mi lado que hace mover mi cabello.
Miro lentamente hacia mi lado izquierdo y dos ojos violáceos me miraban fríamente.
No se en que momento el saltó y se paró justo al lado mío pero si no tuviera controladas mis emociones hubiera saltado del palco del susto.
Kyouko:¿Tú... qué rayos eres?.--Dije sorprendida.--
Él no respondió y siguió mirándome fijamente.
Okey. Esto me está dando miedo.
Más bien el brillo de esos ojos sorprenden mucho.
Y en ese momento alguien más llega a la escena desde la entrada principal que estaba debajo de mí.
Era un hombre de casi cuarenta años y había algunas canas en su cabello negro.
Pero me fije en sus ojos que eran del mismo color que los de Castia y de Rubí.
Este hombre es el duque Demetrius y es el encargado de este lugar.
Debe de haber venido hasta aquí por este alboroto.
¿Eh?. ¿Por siento que mis pies no tocan el suelo?.
Miró hacia abajo y efectivamente.
Mis pies apenas tocan el bordillo del palco.
¿Pero cuál sería la razón?.
Sin perder el tiempo empecé a buscar la razón y resulta ser que la cola de criatura había agarrado mi capa y me levantaba.
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¡¿Reencarné en la princesa abandonada?!.
FantasyAño 2091. Me llamo Nanase Kyouko y desarrollé el mejor juego de realidad virtual en la historia de la humanidad. Pero... ¡¿Por qué tuve ser reencarnada en él?!. Alguien me mató y me puso dentro del juego. Y lo peor de todo nací como la Princesa aba...