I was screaming your name trough the radio - Soukoku

Three Cheers For Four Years - V

Junio, dos años, cuatro meses y una semana desde el lanzamiento de Corrupción.

Chuuya regresa de su tiempo libre con un nuevo objetivo. En lugar de ir a la oficina el primer día de junio, va al departamento de Kajii. Toca la puerta rápida y contundentemente cuando llega, algo impaciente. Lleva días dándole vueltas a la idea.

—Mierda—dice Kajii mientras abre la puerta. Él mira a Chuuya—¿Qué quieres?

—Déjame producir tu álbum—dice Chuuya, empujándolo para entrar al departamento. No lo expresa como una pregunta.

—¿Le pegaste a la salsa demasiado fuerte mientras estabas fuera?— pregunta Kajii, claramente no aceptando la semidemanda de Chuuya sin convencer—Tú no eres un productor.

—Yo tampoco era compositor, pero gané cinco premios Grammy cuando tenía dieciséis años—dice Chuuya, sin vacilar en su seguridad—Déjame producir tu álbum.

—¿Por qué?—pregunta Kajii, levantando las manos en evidente confusión.

Chuuya había pensado en lo que había sido diferente entre este año y el año pasado, lo que lo había hecho descarrilar tanto. Las ausencias de Arthur y Dazai habían sido factores contribuyentes, pero esa no había sido la causa raíz. Arthur y Dazai lo habían ayudado a sentirse humano (bueno, Dazai más que Arthur, pero ese no es el maldito enfoque en este momento), pero antes de eso había tenido algo más.

Incluso cuando tocaba pop mediocre con The Sheep, la música lo había hecho sentir más estable, más como él mismo. O la versión de sí mismo que quiere ser. Chuuya no ama en quién se ha convertido desde agosto pasado, esta persona poco creativa que se sienta y hace el papeleo mientras otros toman el centro de atención. Chuuya nunca ha estado en la música por la fama, sino por la forma en que las canciones lo hacen sentir.

Todavía no puede enfrentarse a escribir un álbum para sí mismo sobre su propia vida, por lo que ayudar a su... amigo (y ugh, no es fácil admitir que eso es lo que Kajii es para él ahora) es la siguiente mejor opción. Chuuya se divirtió mucho tocando con The Black Lizards después de que él y Kajii se superaron. No son tan diferentes cuando se trata de música como pensó al principio. Ambos tienen una veta salvaje que Tachihara y Gin tienen un poco, pero no en la misma medida. Chuuya está seguro de que él y Lemon Fucker se conocen lo suficientemente bien ahora que pueden hacer algo realmente genial juntos, incluso si se enfrentan todo el tiempo.

—Quiero volver a escribir música— dice Chuuya con calma. Se encuentra con los ojos de Kajii con confianza—Sé que puedo ayudarte a hacer que tu álbum sea genial.

—Así que escribe tu propio maldito álbum—dice Kajii, frunciéndole el ceño—No te metas en mis cosas.

—Estás luchando con eso, ¿no?— pregunta Chuuya, con una voz ligeramente burlona—Es por eso que estás realmente aquí. Estás jodidamente atascado y no quieres admitirlo.

—Cuídate, Baby Red—advierte Kajii sombríamente. Él mira a Chuuya.

Chuuya no retrocede—Tengo razón, ¿no? Pero puedo ayudarte. Escribir para un solista es diferente que para una banda. Sé cómo funciona. Y siempre he sido mejor que tú en las sutilezas de la música, y lo sabes.

Kajii se ríe con dureza—¿Qué da la idea de que me gustaría volver a trabajar contigo?—pregunta con desdén—Ya tuve suficiente de ti tratando de darme órdenes en The Black Lizards.

—Ahora nos entendemos—dice Chuuya, cruzando los brazos—No voy a tratar de domesticarte esta vez. Todavía vas a estar a cargo. Pero puedo ayudarte a tomar los sentimientos e ideas que tienes y convertirlos en algo complejo y matizado—Chuuya le sonríe a Kajii a pesar de su visible desgana—Podemos hacer un álbum jodidamente extraordinario—dice Chuuya, con voz casi engreída—Sé que eso es lo que quieres, un álbum número uno.

—Hirotsu es mi productor—dice Kajii vacilante. Claramente está en guerra consigo mismo en base a su expresión facial.

Chuuya tiene que forzar una sonrisa. Lo tiene totalmente—Ese viejo me ama—dice encogiéndose de hombros—Puedo pedirle que me lo cambie fácilmente.

—Estoy a cargo—declara Kajii, señalando con el dedo para enfatizar. —No tú. Lo que digo va.

—Dentro de lo razonable—asiente Chuuya, dejando que solo se muestre un atisbo de sonrisa.

—¿Dentro de lo razonable—repite Kajii con un gemido dramático—¿Por qué diablos estoy de acuerdo con esto? Ya lo odio.

—¿Quieres un golpe de ego o un éxito de ventas?—pregunta Chuuya, ahora sonriendo completamente.

—Oh, cállate con tu pequeña mierda arrogante—dice Kajii irritado, poniendo los ojos en blanco—Ya sabes que lo voy a hacer. me voy a arrepentir de esto Lo sé.

—Pongámonos a trabajar, Lemon Fucker—dice Chuuya, con una amplia sonrisa. Kajii deja escapar otro gran gemido, pero va a buscar su partitura.

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Nota de la traductora:

Ya sé, ya sé, capítulo muy corto. No soy fan de poner dos fechas en una sola parte.