I was screaming your name trough the radio - Soukoku

Three Cheers For Four Years - XV

Agosto, tres años, seis meses y una semana desde el lanzamiento de la Corrupción

Finalmente está aquí. Después de un año y medio de buen comportamiento (bueno, comportamiento decente), Dazai está listo para comenzar con la Agencia de detectives de audio la próxima semana. También es algo bueno, había estado empezando a volverse un poco loco con la espera. Santoka se ha mostrado cada vez más molesto con sus payasadas para mantenerse ocupado.

Así que había iniciado un incendio menor, nada había resultado dañado. (Había sido mejor que escuchar el dúo de Golden Demon de Kouyou y Chuuya por milésima vez. Su voz es tranquila… esa no es una oración que valga la pena seguir).

En este momento está en una tienda por departamentos con Santoka en la sección de ropa para hombres, probándose ropa para su nueva carrera con la ADA. Es bueno tener una razón para no usar pantalones de chándal por una vez. Santoka está sentado en una silla en el vestidor, aunque no está muy interesado mientras Dazai se prueba cosas.

—¿Qué tal esto?—pregunta Dazai, saliendo del vestuario y mostrando su última elección, un chaleco oscuro sobre una camisa de vestir azul claro. Agregó una corbata de bolo y un colgante azul para darle vida al atuendo. Sus vendajes sobresalen en sus muñecas y cuello.

Santoka nunca había dicho nada sobre las vendas más que pedirle que sacara la basura del baño si la iba a llenar con tanta frecuencia con ellas.

—Todavía no veo por qué no te pones un traje—dice Santoka por quinta vez hoy. No parece entusiasmado por enviar sus compras del sábado con Dazai.

—El negro es un color tan feo—dice Dazai a la ligera, dando una vuelta en el espejo—Estoy harto de eso.

La expresión de Santoka cambia, una mirada de complicidad en sus ojos.

—Beige—dice Santoka, poniéndose de pie y caminando hacia un perchero con gabardinas color canela—El beige es un color agradable. Iría muy bien con eso.

Le pasa uno de los abrigos a Dazai. Hace que Dazai piense en Odasaku y en el atuendo que usaba como empleado del departamento de envíos de PMR. Se siente bien tener una parte de él con él mientras hace esto. Él es quien lo inspiró a hacer el cambio.

—El beige es un color excelente—dice Dazai, poniéndose el abrigo. Le muestra a Santoka una gran sonrisa y un pulgar hacia arriba.

La Agencia de detectives de audio todavía está en Los Ángeles, pero en una parte de Los Ángeles muy diferente a la que está acostumbrado Dazai. No tienen una oficina para ellos solos, comparten el edificio con otras empresas. Hay un pequeño café en el primer piso en el que Dazai se detendría si no estuviera llegando tarde.

Fukuzawa le había ofrecido a Dazai un lugar para quedarse en un departamento cerca de la oficina donde vivían la mayoría de los otros empleados. Dazai se había mudado durante el fin de semana, no es que tuviera muchas cosas para traer. Aún así, había hecho que Santoka lo ayudara con sus pocas cajas (y podría haber llenado una de esas cajas con libros que le había robado).

El apartamento es posiblemente incluso más pequeño de lo que había sido el antiguo dormitorio de Chuuya. Menos mal que Dazai no tenía muchas cosas. No está seguro de que un piano quepa en la sala de estar de la cocina combinada. El dormitorio y el baño también son diminutos, y ha vuelto a dormir en una cama doble. Sus piernas cuelgan del borde.

Había tenido problemas para dormir la noche anterior, demasiado lleno de energía y anticipación. El entorno desconocido tampoco había ayudado. Las paredes eran muy delgadas y podía escuchar voces apagadas hablando a su alrededor. Las ventanas también dejan entrar mucho ruido de la ciudad.