Bendita sea mi mala suerte [Bnior/JJP]

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—¡Espera! Bambam, ten cuidado... oh, mierda...

Los cuatro se estremecen al unísono cuando Bambam deja caer la pila de platos de metal, que había estado cargando, sobre el suelo de mármol. Se dispersan y resuenan con una reverberación horrible y discordante en el salón donde intentan instalar la mesa de catering.

Bambam se tapa las orejas con ambas manos y se dobla casi por la mitad por el ruido y el intento de desviar la vergüenza sobre su cabeza en lugar de directamente hacia él.

El personal que se prepara para el resto del evento los mira, luego intercambian miradas entre ellos que, incluso desde el otro lado cristalino del salón, puede decir que cuestionan su competencia. Jinyoung se endereza y suspira, retorciéndose un poco cuando los golpes resuenan en el suelo pulido hasta sus oídos.

—Sí, ahora tienes que desinfectarlos antes de que podamos usarlos

Minhyuk sacude su cabello rubio de sus ojos.

—¿Realmente necesitamos hacerlo? Quiero decir, mira esto —dice poniéndose en cuclillas para pasar un dedo por el mármol color arena bajo sus pies. Mostrándolo en dirección a Jinyoung, sonríe. —Prácticamente podrías comer en este piso

Haciendo una mueca, Hyunwoo se cruza de brazos y planta una patada en el trasero de Minhyuk para empujarlo.

Él grita, indignado, sonrojándose mientras Bambam y Hyunwoo se ríen. Minhyuk se pone de pie, frotando teatralmente el lugar donde fue golpeado y hace un puchero.

—Sólo digo. Si está lo suficientemente limpio como para comer, ¿por qué perder el tiempo desinfectando esos platos?

Hyunwoo no está de acuerdo ni en desacuerdo, y Jinyoung lo mira.

—No puedes estar a punto de dejar que hagan esto

Después de recoger todos los platos del suelo, Bambam camina hacia la larga mesa de servicio y los deja, tratando de evitar que caigan al suelo nuevamente mientras se deslizan fuera de su torre inestable. Se gira, apoyándose en el borde.

—De todos modos, no creo que tengamos tiempo. ¿No empieza pronto el evento? Los cocineros ya están en la cocina. Ni siquiera sé si tendríamos espacio para lavarlos

Jinyoung mira a Hyunwoo, quien deja que Minhyuk se apoye en él como un niño pequeño.

—¿Realmente vamos a hacer esto, hyung?

Hyunwoo no responde de inmediato, sino que mira por encima del hombro hacia donde Bambam todavía está apoyado en la mesa. Hay esa mirada en sus ojos; Jinyoung se gira a mitad de camino para ver qué está haciendo Bambam, pero el más joven solo se muerde el labio mientras se ríe y evita el contacto visual.

Con un suspiro acumulándose en su pecho, Jinyoung mira a Hyunwoo teniendo una conversación silenciosa con Minhyuk, cuya sonrisa solo se hace más y más amplia. Finalmente, mira hacia atrás.

—¿Podemos realmente decirles que no? —dice con un encogimiento de hombros y una sonrisa.

—Sí, en realidad, podríamos —murmura Jinyoung, poniendo los ojos en blanco, pero sabe que es inútil: no va a llegar a ninguna otra parte con Hyunwoo hoy.

Después de unos momentos más de charla ociosa, Jinyoung los reúne y los pone en movimiento para terminar de configurar. El personal del evento aún está acomodando las sillas en ordenadas filas, de espaldas a ellas hacia un podio instalado al otro lado de la sala.

Jinyoung observa medio interesado mientras coloca las sartenes en filas, levantando la vista a tiempo para ver una gran pantalla de proyector que baja del techo detrás del podio. Cuando finalmente termina, se sorprende al ver el logotipo de su universidad proyectado tenue y acuoso con todas las luces del salón de baile encendidas.