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—Hola, bienvenido a Lim Broadcasting Systems. ¿Tiene una cita reservada?

Espera que su voz no traicione lo nervioso que está cuando traga y responde.

—Estoy aquí para ver a Lim Jaebeom

Sus ojos se abren como platos y hace un ruido de sorpresa.

—¡Vaya! ¿Tienes una cita?

Jinyoung se mueve torpemente, consciente de que el sudor que lentamente comienza a acumularse en sus sienes y la forma en que agarra la correa de su bolso probablemente parezca un poco sospechoso.

—No, no lo sé, pero si le dice quién es, querrá verme...

Algo en su lindo rostro redondo cambia; se da cuenta de que es una mirada de lástima y le enferma el corazón. Se coloca el cabello largo detrás de la oreja y dice en tono de disculpa.

—Lo siento, señor, pero no es así como funciona. Está disponible solo con cita previa

—¿Puede simplemente... —suspira, soltando su bolso con una mano para pasársela por el cabello. —¿Puede intentarlo? Solo dígale que es Park Jinyoung y que es una emergencia

—Señor, no puedo...

—Por favor

Debe haber algo en su voz o en la expresión de su rostro, porque ella simplemente respira hondo y asiente.

La mujer lo observa mientras toma el teléfono de su escritorio, se lo acerca a la oreja y presiona el botón para marcar el número de la oficina de Jaebeom.

Jinyoung está repitiendo una y otra vez en su cabeza una oración en la que él está y no en alguna reunión, el suspenso lo mantiene tambaleándose al borde mientras ella lo observa con ojos que parpadean lentamente mientras la línea sigue sonando.

Finalmente, se sienta derecha y agarra el teléfono con la mano en lugar de balancearlo sobre su hombro.

—Hola, Sr. Lim, soy Dahyun. Tengo a alguien aquí preguntando por usted... Sí, lo sé. Su nombre es Park Jinyoung y dice que es una emergencia...

Dahyun se queda en silencio por un momento antes de quitarse el teléfono de la oreja y colgarlo. Ella lo mira, desconcertada.

—Lo siento —dice Jinyoung, con una sensación resbaladiza en la parte posterior de su garganta como si fuera a vomitar. —No fue mi intención meterla en problemas...

—No es eso —dice inclinando la cabeza para mirarlo con curiosidad. —Apenas dije que era una emergencia antes de que me dijera que te enviara directamente

Él se sonroja.

—Lo siento. Esto no debe suceder a menudo

—En realidad, no —dice y niega con la cabeza, estirando la mano para tocar el timbre. —Pero, es extraño que me haya hecho cancelar todas sus citas para el resto del día

Jinyoung trata de no sorprenderse por eso y solo le da las gracias en voz baja cuando ella lo dirige hacia los ascensores al otro lado de la puerta de vidrio esmerilado y hasta el piso 19, donde está la oficina de Jaebeom.

Se ríe nerviosamente cuando agarra la manija de la puerta y se desliza. La palma de la mano resbaladiza por el sudor antes de que pueda agarrarla bien y abrir para desaparecer a través de ella. Afortunadamente, el banco de ascensores está vacío de personas; presiona el botón para subir un poco demasiado fuerte y sisea entre dientes cuando retira la mano.

Mordiendo su pulgar, golpea un pie y espera ansiosamente a que baje el ascensor para llevarlo de regreso.

Cuando sale del ascensor un par de minutos más tarde, se sorprende al ver que el piso 19 es una versión más pequeña del vestíbulo de abajo. Hay un escritorio similar a su izquierda ya su derecha hay un área de espera con cuatro de las mismas sillas del otro vestíbulo.

Bendita sea mi mala suerte [Bnior/JJP]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora