Bendita sea mi mala suerte [Bnior/JJP]

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En cualquier caso, la primera oleada de tensión llega una mañana cuando están acostados en la cama después de una sesión particularmente atlética, la cual deja a Jinyoung sintiéndose débil y cansado.

Está recostando su cabeza en el pecho de Jaebeom, sus ojos miran, pero no ven realmente la franja de cabello en el estómago de Jaebeom, la que termina donde las sábanas negras aterciopeladas se levantan sobre sus caderas.

La piel de gallina estalla de arriba abajo en sus brazos cuando Jaebeom arrastra perezosamente las yemas, ligeras como plumas, a lo largo de los hombros desnudos de Jinyoung.

—Podría cancelar la reunión —murmura, y aunque Jinyoung no lo mira, casi puede sentir el calor de la mirada en la curva de su espalda desnuda, todavía pegado a las sábanas.

Jinyoung hace un ruido contra la parte posterior de sus dientes, resoplando.

—No seas ridículo

—¿Hmm? ¿Cómo es eso ridículo? —pregunta, y Jinyoung lo siente levantar la cabeza de la cama.

Jinyoung se inclina para mirarlo y hace un pequeño ruido de sorpresa cuando Jaebeom lo agarra del hombro y lo hace rodar para que quede atrapado debajo de él.

Traga saliva y trata de no excitarse por la forma en que la sábana se deslizó lentamente del trasero de Jaebeom para revelar una escultura perfecta. Desde su ángulo, y la desaparición de la manta oscura, puede ver la larga línea del cuerpo del mayor.

—Ahjussi —dice, y sus ojos vuelven a encontrarse con los suyos donde se han oscurecido considerablemente. —Vamos, no canceles la reunión por mi culpa...

—Es mi compañía —ronronea, usando una rodilla para chocar contra los muslos de Jinyoung y abrirlos más. Éste obedece, haciendo un pequeño sonido en su garganta. —Estarían eufóricos si lo cancelo, de todos modos

—Si estás tan seguro...

—¿Contigo desnudo así en mi cama? —se inclina e intenta probar la piel de Jinyoung a lo largo de su garganta con la lengua, pero solo la roza con labios húmedos a lo largo de la mandíbula. —Nunca he estado más seguro, eres tan bonito...

El corazón de Jinyoung cae, asumiendo que, si no hubiera sido interrumpido por la canción que sonaba desde su teléfono en el tocador junto a ellos, esa oración habría terminado en "bebé".

En cualquier caso, casi le da un cabezazo en la cara a Jaebeom cuando se sienta y toma ciegamente el teléfono para verificar el identificador de llamadas. Puede sentir los ojos de Jaebeom sobre él mientras lo gira rápidamente, silenciando la música y suspirando cuando aparece el nombre de Hoseok-ssi en su visión.

—¿Quién era? —Jaebeom pregunta, aún acostado sobre él en equilibrio sobre sus manos.

Jinyoung no puede evitar notar que la tensión sexual ha desaparecido del espacio limitado entre sus cuerpos. El timbre de la voz del mayor ha cambiado y traga saliva por la culpa.

—Nadie —dice, pero siempre significa alguien.

Su corazón tartamudea y cae cuando Jaebeom se sienta sobre sus rodillas y se gira para levantarse de la cama. Jinyoung se apoya en los codos y observa la rigidez de sus hombros mientras se dirige al armario y desaparece dentro.

—Ahjussi...

Da un paso atrás un momento después, sin mirarlo mientras desliza sus brazos en un botón azul hacia abajo y comienza a hacerlo.

—No es "nada", Jinyoung. ¿Crees que no me doy cuenta de la forma en que miras tu teléfono como si fueras a vomitar? Sé realista. Es tu ex, ¿cierto?