Voluble (Catradora)

Capitulo III

"Por tu culpa, soy cobarde y nada genial"

Desde lo de aquel día he estado evitando hablar con Catra.

Aun no puedo creer lo que esta pasando, debimos haber tenido más cuidado.

 —¡Carajo!— le di una patada a un bote de basura que estaba por ahí.

Se que debería hablar con ella, pero aún no se que decirle después de lo que le dije la última vez. ¡POR DIOS! ¿Como se me ocurrió decirle algo como eso?

¿¡En que estabas pensando rubia tonta!?

Necesito disculparme con ella. 

— ¡Oye, Adora! Piensa rápido — Una voz gritó desde lo lejos, justo después de que una gran pelota cayera en mi cabeza que me hizo tambalear haciéndome caer — Ups —Eran Lonnie, Kyle y Rogelio. Debí suponerlo.

Rogelio me ayudo a levantarme.

—¿Quieres jugar una partida de poncha? — Me preguntó Lonnie, haciendo unos trucos lanzando la pelota atrapándola con las manos.

— No, Chicos. Lo siento. Tengo que hacer algo muy importante.

A este paso ya han de estar sospechando que les oculto algo. Sobre todo Lonnie, quien me miró con una ceja enarcada.

—Sí, sí, sí. Últimamente estas algo ida. Digo, te distraes en los entrenamiento y apenas si sales de tu habitación. Te la pasas con Catra, que por cierto no ha hecho acto de presencia— puso ambas manos en su cintura y apoyó su cuerpo en una pierna — ¿Sabes, Adora? No se que estén ocultando tú y Catra, pero ten cuidado, Hordak tiene ojos por todas partes.

Con ese ultimátum, la morena se alejó seguido de los otros chicos.

De hecho, no me he olvidado de esa parte. ¿Que es lo que haremos Catra y yo? ¿Como le ocultaremos esto a Hordak y que no se de cuenta de nada?

 ¡POR MIS PELOTAS!

Esto ya me esta sobrepasando. Amo a Catra, haría lo que fuera por ella, y al parecer lo único que nos queda es escaparnos de la Horda. Tengamos que irnos muy lejos donde no nos encuentre.

***

Entré a a la habitación.

— Hola, gatita — la ví inclinada hacia un costado de la cama con la cabeza metida en un balde. Me acerqué rápidamente.

 —Hey, estoy aquí.— se limpió con el antebrazo y se reincorporó. Le pase una de las botellas de agua que tenía y bebió un sorbo que luego escupió en el bote.

— ¿Ya estas mejor?

Hizo un sonido de afirmación. Me senté al frente de ella y la mire a los ojos.

—Lo siento.

Me miro atónica, para luego soltar un suspiro y tomarme de las manos.

—No te preocupes por eso. Entiendo perfectamente como te sientes.

— Sí, lo sé, pero no soy quien para reaccionar así, amor— tragué grueso al decir eso — No debí haberlo dicho.

Bajé la cabeza avergonzada, Catra puso sus manos en mi cara y la levantó para besar mis labios con dulzura.

—Está bien. Ahora lo importante es pensar en un plan.

—¿Tienes algo en mente? — apoyo mi cabeza en su pecho.

—Aun no he desistido de la idea de irnos de aquí. Puede que no sea una buena idea, pero tampoco nos podemos quedar aquí sin hacer nada, a esperar a que Hordak se entere y nos haga quien sabe que, con tal de deshacernos de nosotras.

Esta decidido. Huiremos. No permitiré que le hagan algo a la chica que amo. Juro que la protegeré, así sea con mi vida.