Perspectiva

Capítulo 9

 Capítulo 9.

Esperaba que Darkness quisiera dormir en la habitación de Emma, pero cuando volví a mi cama, él ya se encontraba ahí tumbado sobre mis sábanas.

No se había puesto la camisa que le entregué hace unas horas. ¡Y maldita sea! Se veía endemoniadamente sexy sin ella, tendida sobre mi cama.

Su tatuaje sobresalía en medio de la tenue luz. Deseaba con ansias recorrerlo con los dedos.

         - ¿Te quedarás ahí toda la noche mirándome, Samanta?

Salí del trance en el que estaba producto del invitado. Cerré la puerta y me acosté a su lado.

No quería irme a dormir, me apetecía hablar con él. Que me dijera cosas sobre su vida y me diera respuestas aunque sabía que eso no ocurriría otra vez.

Apague la luz y me arrope con las sábanas. Miraba el techo oscuro y negro para no admitir que estaba muy nerviosa.

Sentí sus manos en mi costado izquierdo, me giro hábilmente y de esa manera le di la espalda. Su mano se movió por encima de mi cabeza para dejar su máscara en la mesita de noche. Pasó uno de sus brazos por mi cintura y me apegó a él tanto que era consciente de su respiración y los latidos de su corazón.

      - ¿Darkness?

      - Guarda silencio, estoy agotado.

Me relaje hasta que en algún punto de la noche me dormí abrazada al villano más imponente y buscado en la región.

Me sentía extraña, era la primera noche luego de meses en que realmente descansaba. Me desperté cuando los rayos del sol penetraron la habitación, las sábanas estaban enredadas en mi cuerpo. Gire en la cama buscando mi teléfono para saber qué hora era. Al levantar la mano, toque algo suave. Me desconcertó cuando lo observé. Los recuerdos de la noche anterior, fluyeron como el agua y me levanté con rapidez. Gemí de dolor y me senté, a consecuencia del esfuerzo físico del día anterior mis músculos quedaron fatigados. Comencé a moverme lentamente, buscando a Darkness. Fui a la sala principal y a la cocina, incluso al baño, pero no lo encontré.

Volví al dormitorio y en la mesita de noche se encontraba la máscara, además de una nota y un muffin de chocolate.

"No quise despertarte cuando me fui. Gracias por la ayuda en el parque. Como recompensa, te compré un muffin. Prepara café y come, tu tía tiene razón" D.G.

¿Cómo sabía que mi tía me encontraba muy delgada y quería que comiera más?

Darkness tenía maneras impresionantes de volverme loca por ser el rompecabezas más complicado del mundo.

Durante la tarde recibí una llamada de Alanna, sonaba preocupada cuando conteste.

     - Sam, al fin contestas. Ayer intenté llamarte, pero las líneas no conectaban. La pelea fue brutal, hasta el punto de que las noticias le dieron cobertura total a la disputa en el parque. Todos pensaron que por fin detendrían a Darkness, sin embargo nadie esperó el apoyo que recibió.

     - Sí, lo vi en televisión una vez que llegué a casa. Estaba muy sorprendida.

   - Tienes razón. Me inquieta la persona que lo ayudó, desaparecieron en la noche. Sam, ¿no sabes nada al respecto?

Tome la decisión de no contarle nada. No pretendía asustarla, pero ocultar que había sido yo quien socorrió y luego escondió a Darkness Ghastly haría que Alanna sintiera temor por mí y cancelara su viaje para venir única y exclusivamente a matarme. Aunque si le pregunte por otra cosa.