Capítulo 2♥

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Salí de la casa con la esperanza de encontrar paz lejos de Theo y que mejor manera que pasar tiempo con Christian, mi novio, es un chico genial, lo conocí poco tiempo después del divorcio de mis padres, pero tenia algo malo, era controlador, por lo que le molestaba que viviera con Theo, ya que decía que no le gustaba saber que dormía con un chico que no es nada mio.

Le llamé por teléfono para saber si estaba en su casa:

-¿Hola? -contestó.

-Hola Chris ¿estás en casa? Tuve otra pelea con Theo y no quiero estar cerca de él -le expliqué la situación.

-Claro, además estoy solo en casa, aquí te espero -Colgó.


Al llegar a casa de Christian, ni siquiera saludé y entre diciendo enojada:

-Odio a Theo, odio a papá por haberse casado con su madre y me odio a mi misma por haber aceptado esa relación.

-Tranquila guapa. Olvídalos a todos y vivamos este momento -dijo y empezó a besarme acariciando mi espalda y desabrochando mi vestido.

-Chris, detente... -traté de pararlo.

-¿Por que? Se que quieres estar conmigo y yo ya te he esperado demasiado -Y al decir esto sus besos se tornaban mas salvajes.

-Para... ¡te digo que pares! -Grité y le mordí el labio inferior para que me soltara.

-¡¡Ouch!!

-¡Cuando te digo que pares es que pares! No quiero hacer el amor y punto.

Me empujó al sofá y dijo:

-Te he tenido mucha paciencia niña, soy hombre y quiero como cualquier otro que mis deseos sean cumplidos. Y si no lo vas a hacer por las buenas lo harás por las malas -dijo y me besó a la fuerza.

No estaba dispuesta a ser juguete sexual de ningún hombre así que le di una patada en las bolas.

-¡Y esto es solo una prueba de lo que te haré si te vuelves a acercar a mi! -Después de decir esto me fui de su casa.


Mientras caminaba me di cuenta que no tenía a nadie en el mundo, mis padres prefirieron hacer una familia fuera de mi, mi novio solo me quería para tener sexo, de mis amigas me he dado cuenta que solo están para fiestas y Theo... bueno de Theo no esperaba nada.

Me fui a casa ya que al menos allá podría tratar de dormir o leer algo. Cuando iba a abrir la puerta del departamento me di cuenta que había olvidado las llaves. Toqué el timbre varias veces, pero Theo no parecía estar en casa.

Me senté en la puerta del departamento a esperar a que llegara. Lo llamé al celular y no contestaba. Pasó una hora, dos, y así fue como se fueron mas de tres horas.

Estaba cansada de llevar esta vida, traté de aguantar las lagrimas pero no pude. Lloré

Después de un rato Theo llegó por fin a casa.

-Shailene? -preguntó al verme.

-¡Theo! Al fin llegaste! -Dije y lo abracé llorando.

Olvidar que eres tu. #SheoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora