Dorian Berrycloth
Estuvimos al menos 1 hora más en la escuela porque a cada pasillo que entrabamos una persona se nos acercaba y nos felicitaba, literalmente quise agarrar a puños a todo el que nos veía y quería acercarse.
Después entramos a los vestidores como pudimos invadir a las personas, nos bañamos y vestimos para salir de la escuela y montarnos a nuestros autos, he ir a comprar alcohol.
Todos íbamos a risas y con la música a todo volumen con 505 de Arctic Monkeys. Bajamos de los autos y entramos al lugar, todos nos pusimos a agarrar todo el alcohol que pudiéramos cargar, lo llevamos a la caja y la mirada de la cajera era aburrida y coqueta.
-Su identificación- pidió.
Yo se da di y ella la tomo de manera que apenas la vio, me miro coquetamente y me sonrió.
-Son 738 euros-pidió.
Yo pague y tomamos el alcohol, voltee a ver a la cajera y me guiño el ojo y yo regrese la mirada con mueca de desprecio.
Subimos el alcohol a los autos y después nos fuimos a dirección a mi casa para preparar todo.
Escondimos en la recámara de mi hermano lo importante y lo cerramos bajo llave, no hay problema con eso, ya que los viernes él se va con mi padre a los viajes de negocios y regresan mañana.
Pusimos mesas de Billar, Póker y Conquián, aparte otra de bebidas. Y después las bocinas para la música, todo iba demasiado bien.
Ya casi era la hora de que las personas llegarían, por lo cual significaba que tendría que ir por Katherine.
Salí de mi casa y subí a mi auto para ir por ella. Ya afuera de su casa ella tardó 10 minutos es salir, vestía con un vestido corto color violeta y tacones negros con el cabello amarrado en coleta. Ella subió al auto y me saludo con un beso en la mejilla. Todo el camino parecía nerviosa, pero no quise incomodarla más, así que no pregunte.
Ya de regreso en casa me estacioné y cuando estaba a punto de salir me sujeto de la muñeca, lo que hizo que me detuviera y volviera a sentarme.
-Antes de entrar, necesito decirte algo-exclamó.
Yo fruncí el ceño y quedé mudo para escucharla.
Ella empezó a acariciar su vestido que parecía que quería deshacerse de una arruga que tal vez tenía.
-No sé cómo decírtelo, no quería que esto pasara- balbuceó.
- ¿Qué cosa?, sabes que puedes decirme lo que sea- exclamé.
-Estoy embarazada- soltó.
Abrí los ojos como platos y me quede sin aliento, ¿Seré padre?, ¡¿Qué carajos?!
Ella pareció leer mi expresión y lo que estaba pensando.
-No es tuyo- contestó- yo contigo me cuidé excesivamente por lo que te paso hace años y temía que pasará, pero no eras el único con que me veía
Eso hizo sentirme confundido.
-Pero ¿De quién es entonces?
-No puedo decírtelo, pero lo que sí puedo decirte es que esto aquí acaba y ya no podremos vernos más, al menos no de la manera que conocemos- en su mejilla empezó a caer una lágrima que yo le limpie con mi dedo.
-Entiendo- respondí- no es mi asunto, y si te hace feliz y es lo que quieres no me quejaré.
-No entiendo cómo tienes un carácter de mierda, pero eres comprensivo- soltó una pequeña sonrisa.
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My downfall is you
RomanceMelisa es nueva en Londres y busca tener un "buen futuro" tras la reciente muerte de su padre. En una fiesta conoce a Dorian, que es un chico reservado y poco amigable que no quiere que ni una mosca se le acerque. Lo que no sabia es que Melisa se c...