𝐉𝐄𝐍𝐋𝐈𝐒𝐀 ❝제니 리사❞
𝐑 | Donde Jennie es roommate de Rosé y esta tiene una "hermana", que en realidad es su novia. Y a Jennie le gusta.
«Lo siento, Jennie. Pero Lisa en realidad es mi novia»
✧ Jenlisa au | Jn bttm! Lm top!
✧ social media (chats...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
[...]
Ya era muy noche cuando Jennie y Lisa estaban más que listas para regresar a Seúl y disfrutar sus últimos días de vacaciones juntas. Habían decidido irse de vuelta en camión y ahora sólo tenían que esperar a que aquel transporte que ya se había retrasado más de media hora, estuviera cerca de ellas. Estaban cansadas después de aquel perseguimiento por la playa y no querían soportar tanta espera.
Lisa se había separado de la castaña unos minutos para irse a comprar chuches a la pequeña tienda de la terminal que estaba más iluminada que su propia casa. No tardó tanto al pagar y regresar con bebidas y paquetes de snacks en su bolsa ecológica, con la cual nunca le tenía que hacer falta.
- ¿Qué pasa, Jen? - Al llegar a su lado, nota a su novia con algo de nerviosismo. Y aun así seguía lográndose ver cómo un ángel.
- Rosé acaba de regresar al departamento y... hubo un pequeño, pero diminuto accidente con un par de zapatos de marca suyos - Rió nerviosa - Hace un tiempo, desde que este pequeñín travieso llegó a mi vida, dejé que explorara su nuevo hogar y la puerta de la habitación de Rosé estaba abierta, y pues él entró. Pensé que no habría problema, ya que en mi cuarto no hizo nada malo, pero al entrar al de Rosé, me fijé que la maleta que había llevado a su habitación y que había olvidado, la dejé completamente abierta. Así que Kuma no hizo más que morder un par... o dos - Acarició la cabecita de Kuma al dejarlo salir un rato de su transportador. Sabía que no haría nada que comprometiera la conducta de su cachorro con la demás gente, porque ya estaba cansada, así que prefirió cargarlo en sus brazos.
- Y no se lo has dicho - Lisa le entregó su bebida pedida ya abierta y Jennie bebió un trago de ella.
- Por supuesto que no, Rosé me mataría - Bufó al recordar cómo se había paniqueado al encontrar los zapatos de la rubia con mordiscos horriblemente notables - Y como no supe que hacer o cómo decírselo, los escondí y guardé lo demás que había en su maleta.
- ¿Y qué es lo que te tiene preocupada? Aparte de no saber qué hacer.
Jennie estuvo en silencio unos segundos cuando volvió a hablar y mirar fijamente a Lisa.
- Que Rosé me acaba de preguntar dónde estaban.
No pudo más que beber de nuevo de la botella y cerrar los ojos cuando escuchó una pequeña risa de Lisa. En su mente se reproducían los posibles escenarios que sufriría al llegar a su departamento. Ni siquiera quería imaginarlos, pero su mente no cooperaba.
- Seguro que cuando le digas, no te hará nada. Quizá se enoje un poco, pero te va a perdonar, ya verás - Se acercó a ella y acarició la cabecita de Kuma, dándose cuenta que el cachorro a pesar de estar muy cansado, podía seguir jugando. Lisa recostó su cabeza en el hombro de la castaña y, copiando la misma acción que Lisa, Jennie hizo lo mismo.
